El Senado tratará el próximo martes en comisiones los proyectos de ley de fomento a las pequeñas y medianas empresas, y a la producción de autopartes de origen nacional, y no se descarta que sean sancionados al día siguiente en una sesión ordinaria.
Ambos proyectos fueron aprobados la semana pasada por la Cámara de Diputados y el Senado tiene previsto convertirlos en ley en la que sería la última sesión antes del receso de invierno que durará hasta agosto, cuando la Cámara alta se abocará a debatir la Ley del Arrepentido para casos de corrupción.
En ese plan, las iniciativas deberían ser aprobadas por las comisiones el martes y llevadas al recinto el miércoles para su votación, donde se prevé que sean aprobadas por amplia mayoría tal como ocurrió en la Cámara baja.
El martes, la Comisión de Industria y Comercio que preside el massista Alfredo Luenzo tratará el martes a las 15.30 el proyecto que crea el Régimen de Desarrollo y Fortalecimiento del Autopartismo Argentino.
La iniciativa, impulsada por el diputado del Bloque Justicialista Oscar Romero, sindicalista de Smata, otorga rebajas impositivas a las empresas automotrices que incorporen autopartes fabricadas en el país, con el objetivo de reactivar el sector y generar empleo.
Entre las medidas propuestas por el proyecto, se establece la entrega de un crédito fiscal por parte del Estado a las empresas automotrices que va a variar de acuerdo con la cantidad de autopartes de producción nacional que utilicen en sus vehículos.
El proyecto busca favorecer la incorporación de una mayor proporción de autopartes locales en la producción de vehículos y el jefe del bloque de senadores del PJ-FPV, Miguel Ángel Pichetto, ya adelantó su respaldo con el argumento de que podría servir para reducir la actividad de los desarmaderos ilegales.
Poco después, a las 17.00, la Comisión de Industria y Comercio conjuntamente con la de Economías Regionales, Economía Social, Micro, Pequeña y Mediana Empresa, que preside el peronista federal Roberto Basualdo, tratará el proyecto de fomento de inversiones para las pymes.
Impulsado por el Frente Renovador de Sergio Massa, propone beneficios impositivos para el sector como la eliminación de la Ganancia Mínima Presunta a partir de 2017 y la deducción de un 10% de las inversiones del monto del Impuesto a las Ganancias.
Además, el proyecto apunta a facilitarle a las pymes el acceso al mercado de capitales, permitiendo que las SRL puedan emitir obligaciones negociables, entre otras medidas.
Los dos proyectos fueron aprobados en la Cámara de Diputados con el respaldo de todos los bloques a excepción del Frente de Izquierda y los Trabajadores, que fue la única bancada que votó en contra.
