Como se veía venir, este martes el gobernador de la provincia de Santa Fe, Miguel Lifschitz, expuso el proyecto de reforma constitucional, frente a las máximas autoridades de los partidos políticos de la provincia, que luego será tratado formalmente dentro del ámbito legislativo donde se dará el debate correspondiente.
Tras el encuentro que se llevó adelante en Sede de la Gobernación, en torno a la reforma de la Carta Magna, el gobernador manifestó que se llevó «una expresión muy positiva» ya que “fue unánime el consenso», entre los diferentes representantes de los espacios políticos que se hicieron presentes esta tarde.
“Creemos que hay que concentrar todo el proceso en el año 2018 por ser un año que no es electoral”, señaló en torno a los plazos de discusión que aún no están determinados.
Según puntualizó el mandatario provincial, un punto fundamental que abarca la propuesta son las cuestiones referidas a la institucionalidad de la provincia. En ese sentido, indicó «se reconoce la autonomía municipal, algo que Rosario viene reclamando históricamente; se extienden los plazos de mandatos de presidente de comuna por 4 años; se establece que la elección de los diputados provinciales se va a hacer por sistema d´Hondt; se establece el funcionamiento del Concejo de la Magistratura, se introducen nuevas formas de participación ciudadana».
Asimismo, remarcó: «Lo que está planteando este proyecto es que todos los cargos tengan la posibilidad de una reelección, es decir, dos períodos de cuatro años, igual para todos». Y añadió: “tenemos la paradoja en Santa Fe de que todos los cargos son de reelección indefinida, intendentes, presidentes de comuna, concejales, diputado, menos el del gobernador».
A su vez, destacó la incorporación de la figura del ballotage, es decir, la doble vuelta para la elección de gobernador y vice gobernador. “Es importante porque ayuda a construir mayorías, a darle más legitimidad a elecciones muy disputadas», indicó.
Sin embargo, hubo quienes miraron de reojo el proyecto de reforma. El espacio político encabezado por Carlos del Frade, diputado del Frente Social y Popular fue uno. En declaraciones con Conclusión, expresó la necesidad de tener una «discusión integral«, con el fin de «tener una mejor y nueva Constitución, que le sirva a los santafesinos y santafesinas en la vida cotidiana».
Así como también remarcó la importancia de la legitimidad, “se tiene que dar con la participación de todo el pueblo de la provincia para que se sepa lo que se está discutiendo. Si no se va a leer como una reforma de los partidos políticos para sí mismos. Hay que hacer un esfuerzo muy grande para legitimar esta discusión».
En ese orden, puntualizó alguno de los temas fundamentales que a su entender deberían ser contemplados. «Tiene que haber una propiedad social de la tierra y de la vivienda; la luz y el agua son derechos humanos, por lo tanto hay que garantizar un buen precio que salga de la mecánica del mercado, y también se tiene que discutir si los jueces son elegidos o son eternos».
Por otro lado, Federico Angelini, diputado provincial del PRO, recalcó que “están dadas las condiciones para un debate”, aunque manifestó: “No hay que ponernos tiempo, aunque sí saber que es una instancia muy importante».
En ese sentido, manifestó: “Me da la sensación que hay muchos temas que debatir, no solo en la cuestión electoral, sino en cuanto va a modificar la cotidianidad de la gente».
Otro de los presentes en el encuentro, fue Enrique Estevez, presidente del Partido Socialista santafesino.«En términos generales todos entendemos la necesidad de que exista una reforma en la provincia de Santa Fe, que reconozca nuevos derechos que están establecidos en la Constitución Nacional, y que incorpore nuevos derechos que están en algunas leyes provinciales», señaló.
Y añadió: “Creo que es un gran paso de la política e institucional, necesitamos mejorar muchos temas que preocupan a la sociedad. Hay debates que tenemos que darnos porque la Constitución tiene cosas positivas pero creemos que tenemos que tener una mirada de futuro para nuestra provincia y plasmarlo en una nueva constitución provincial».
