Una familia necesitó en abril más de $200.000 para no ser pobre: el salario mínimo fue insuficiente

La Canasta Básica Alimentaria (CBA), que determina el nivel de indigencia, subió en abril 7,3%, mientras que la Canasta Básica Total (CBT), que delimita la pobreza, aumentó un 6,3% con respecto a marzo, según informó en la tarde de este martes el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Ambas mediciones se encontraron por debajo de la inflación del cuarto mes del año, que fue del 8,3%.

En la medición interanual –es decir, entre abril de 2022 e igual mes de este año– la CBA subió 121,4%, y la CBT, 113,5%: ambos valores se encuentran por encima del Índice de Precios al Consumidor, que en los últimos doce meses aumentó 108,8%.

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Con estos aumentos, en el mes de abril un adulto necesitó $30.469 para cubrir sus necesidades alimentarias básicas, y $65.813 para adquirir alimentos, servicios y vivienda, y no caer en la pobreza. Hace un año atrás, se requerían $13.763 y $30.829, respectivamente, mientras que en marzo pasado se necesitaban $28.388 y $61.886.

Fuente: Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

En relación a cómo afecta este aumento a las familias, el INDEC considera tres tipos de hogares: el primero está integrado por tres personas (una mujer de 61 años, otra de 35 y un joven de 18), y necesitó en abril $74.953 para cubrir la CBA y $161.899 para saldar la CBT. Hace un año, la misma familia requería $33.856 y $75.838, respectivamente.

El segundo hogar está conformado por cuatro personas (dos adultos y dos menores) y demandó en el cuarto mes del año $94.148 para cubrir sus necesidades alimentarias y $203.361 para no caer en la pobreza. Doce meses atrás, esta familia necesitaba $42.526,96 y $95.260, respectivamente.

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El último grupo está integrado por dos adultos y tres menores, y necesitó en abril $99.023 para cubrir la CBA y $213.891 para saldar la CBT. Hace un año, estas cifras eran de $44.729 y $100.193.

Al analizar los ingresos, se advierte que en abril la jubilación mínima fue de $73.664, el salario mínimo fue de $80.342, la Pensión Universal para Adultos Mayores (PUAM) fue de $58.932 y la Asignación Universal por Hijo (AUH) fue de $11.465.

Suponiendo que la primera familia percibió los ingresos mínimos (es decir, una jubilación y dos salarios mínimos), habría recibido ingresos totales por $234.348, llegando a cubrir sus necesidades básicas. La situación, en cambio, sería distinta si uno de los integrantes de este grupo habría dejado de recibir su ingreso mínimo.

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En el caso del segundo grupo, se advirtió que si los dos adultos percibieron el salario mínimo, habrían totalizado ingresos por $160.684, llegando a cubrir sus necesidades alimentarias, pero ubicándose por debajo de la línea de pobreza. Si además hubiesen percibido dos AUH por los menores, los ingresos familiares ascenderían a $183.614, pero la situación no cambiaría.

En un panorama aún más crítico habría estado el tercer grupo familiar: el suponer que ambos adultos percibieron el salario mínimo, pero que además fueron beneficiarios de tres AUH, los ingresos totales de esta familia habrían sido de $195.079: suficiente para saldar las necesidades alimentarias, pero no para cubrir las básicas.