La venta de dólares mediante el sistema oficial estableció un nuevo récord durante febrero, al llegar a 462,6 millones de dólares, superando los 456,2 millones de enero anterior.

Según la información de la AFIP, desde la puesta en marcha del régimen a fines de enero de 2014, se efectivizaron ventas por 3.884,5 millones de dólares, equivalentes a 32.568,8 millones de pesos.

Las compras son realizadas por pequeños ahorristas quienes destinan estos dólares para compras en el exterior, para mantenerlos frente a una devaluación o en otros casos para venderlos en el circuito oficial.

En la última jornada de febrero, se realizaron transacciones por 31,1 millones de dólares, equivalentes a 271,5 millones de pesos.

La cifra de febrero superó a enero y la anterior marca récord de octubre del año pasado cuando se vendieron 446,4 millones de dólares y los 424,7 millones de diciembre.

En tanto que, en las ventas de dólares para ahorro también superaron en enero el récord que había anotado en octubre último, cuando había ascendido a 446,5 millones de dólares. En cambio, las autorizaciones para viajes fueron la segunda más alta desde que se liberó parcialmente el mercado de cambios, en enero de 2014.

De esta manera, la semana financiera y cambiaria cerró con un aumento de las reservas del Banco Central de 101 millones de dólares, a 31.444 millones, al completar el desembolso de un nuevo tramo del swap con China -canje de monedas contable, sin movimientos físicos: la Argentina convierte a dólares una acreditación de yuanes en su cuenta en el país asiático, y China hace lo propio con la acreditación de pesos en una cuenta en autoridad monetaria-.

De este modo, completó dos tramos por el equivalente a 400 millones de dólares, uno al promediar el mes y otro en forma gradual a lo largo de esta semana, que posibilitaron evitar que el mes concluyera con un saldo negativo de 789 millones, para apuntalar el objetivo de sostener las reservas por arriba de los 31.000 millones de dólares.

Como se sabe, la mayor parte de esos recursos contables fueron utilizados para transferir billetes físicos a las personas que demandaron divisas con fines de ahorro, 455,8 millones de dólares y en menor medida, para compras con motivo de viajes al exterior por otros 65 millones de dólares, además de los derivados de los gastos con uso de tarjeta de crédito en el resto del mundo.

El resto de los casi 280 millones de dólares utilizados del swap chino fue aplicado a las autorización de pagos de importaciones de energía e insumos y partes para la industria fabricante de productos electrodomésticos de Tierra del Fuego, y de las terminales automotrices, junto a vencimientos de intereses de la deuda pública.

Esa fue la estrategia utilizada por la autoridad monetaria y el Ministerio de Economía para mantener virtualmente congelado el tipo de cambio y con ello inducir a la desaceleración de la tasa de inflación en los meses previos a las reaperturas masivas de las discusiones paritarias entre sindicatos y empresarios.