El ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, afirmó hoy que de no parar las lluvias que afectan a gran parte del país podría complicarse la cosecha de soja estimada en 59 millones de toneladas, porque «cada semana que sigue lloviendo, se pierden rindes» de los cultivos.

«Todos estamos preocupados por los ingresos de divisas», señaló Buryaile a radio Vorterix, en alusión a la liquidación que efectúan los agroexportadores, y que en la última semana fue 42% menor al año pasado,

Desde la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara) pronosticaron una liquidación de u$s 7.000 millones, entre marzo y mayo, y cuando transcurrió la mitad de ese periodo ingresaron u$s 2.177 millones, es decir, 31% de lo estimado.

Al respecto, el ministro sostuvo que la evolución de la cosecha «depende de si para la lluvia», y aseguró que si eso ocurre «no habrá mayores problemas».

Explicó que hasta el momento «la zona núcleo granífera no tiene los mismos problemas que el Litoral», donde se produjeron fuertes inundaciones, pero indicó que «cada semana que sigue lloviendo se pierden rindes».

Buryaile señaló que «para hacer un balance de las inundaciones uno tiene que tener toda la información», y precisó que «lo que hay hasta ahora es parcial».

«Todavía no sabemos si se detuvo el daño, más allá que hay lugares donde las pérdidas ya son totales», puntualizó el titular de la cartera de Agroindustria, quien precisó que «la situación de emergencia que había en algunos lugares se transformó en situación de desastre».

Destacó que «muchos lugares ya tienen declarada la emergencia agropecuaria que dispara de inmediato la suspensión del pago de impuestos nacionales y provinciales, y los vencimientos en la banca oficial».

Además, señaló que «hay un fondo instituido por ley, de $ 500 millones, que es nada a luz de lo que se está viviendo hoy», y estimó que «seguramente se va a ampliar», aunque subrayó que «nunca jamás va a alcanzar para compensar las perdidas que se sufrieron».

Alerta roja en Entre Ríos

Alrededor de 350.000 hectáreas sembradas con soja en Entre Ríos se encuentran en «alerta roja» por las fuertes lluvias que ya afectaron a más de 12.000 personas, cortaron rutas y caminos y provocaron la muerte de un trabajador rural en el departamento Paraná.

Según un informe de la Bolsa de Cereales provincial, «aproximadamente el 30% del área de soja de primera, alrededor de 350.000 hectáreas, se encuentra en alerta roja», a causa del fenómeno meteorológico.

Las lluvias provocaron el desborde ríos y arroyos y el consecuente anegamiento de miles de hectáreas en toda la provincia, afectando establecimientos agrícolas, ganaderos y lecheros, y el corte de rutas y caminos que impiden el ingreso de las cosechadoras a los campos saturados de agua.

El informe recuerda que en la campaña agrícola 2015/16 se implantó en Entre Ríos un total de 1.345.400 hectáreas con soja, de las cuales 1.174.300 corresponden a soja de primera y las restantes 171.100 a soja de segunda.

Según la entidad, el progreso de la cosecha logrado hasta el momento «es el más bajo de los últimos 14 años, con tan sólo 5% de la superficie de soja de primera trillada, es decir, menos de 60.000 hectáreas sobre el total de 1.174.300 hectáreas».

Según las estimaciones de la Bolsa, si las lluvias continúan en la región «las pérdidas pueden ser cuantiosas» para los productores sojeros.

El productor Carlos Feser dijo a Télam que la soja de primera presenta apertura de las chauchas y pudrición o brote de los granos dentro de las chauchas: «Es increíble, los granos están brotando dentro de las chauchas por la gran cantidad de agua caída».