“Un matambre a $256 el kilo no se vincula con costo de producción sino con pura especulación”, sentenciaba una de las respuestas de la Federación Agraria Argentina a los múltiples comentarios que generó una foto subida a su cuenta de Twitter que mostraba ese precio de góndola.

«¿Sabías que a los productores nos pagan $23 el kilo?», completaba la publicación del tuit original que tuvo muchísima repercusión en las redes.

Este lunes, el flamante presidente reelecto de la FAA, Omar Príncipe, expresó que “al productor se le está pagando entre 23 y 25 pesos el kilo, por eso llama mucho la atención esta distorsión de precios, que llega a estos extremos que un corte de cerdo llegue a los 260 pesos”.

Y agregó que “hay otros cortes más económicos en teoría, como costeletas y otros, que están llegando a los 190 pesos, es un locura”.

Entre los causales, el dirigente agrario aseguró que “lo que está faltando es un Estado que regule esa situación, que determine qué pasa en el medio desde que el corte sale del frigorífico hasta llegar a la góndola”.

Príncipe contrapuso la falta de respuestas del gobierno nacional con la celeridad mostrada para aprobar el ingreso de carne porcina norteamericana. “El vicepresidente de Estados Unidos se pusieron de acuerdo en sólo 48 horas para importar carne de cerdo”, lanzó en LT2.

Desde su asunción, el gobierno ha emitido señales positivas al agro (baja de retenciones, devaluación), sector en el que busca anclar el crecimiento de la economía, elevando niveles de exportación y empujando otras actividades menos desarrolladas en el país.

Respecto a esa relación, Príncipe detalló que “el vínculo del sector del campo con el sector político cambió en el sentido de que hay otro diálogo y nosotros tratamos de aprovecharlo al máximo, pero eso no quiere decir que cambió la situación”.

Y profundizó diciendo que “la Argentina no tiene un problema de productividad, cada vez producimos y exportamos más, pero el gran problema es la competitividad para los medianos y pequeños productores del sector agropecuario”.

El presidente de la FAA reiteró de esta manera críticas hechas días pasados, en el marco del Congreso Anual Ordinario de la Federación en el cual fue reelegido como titular de la misma.

En el evento realizado en el Centro de Convenciones Metropolitano de la ciudad y rodeado de cientos de productores y delegados, el dirigente había expresado que ciertas decisiones en materia económica hacían pensar que argentina más que convertirse en el “supermercado del mundo”, como manifestó en alguna ocasión el presidente, estaba siendo “el depósito del mundo”.

Tambien había criticado allí el alto grado de concentración en el mercado agrario. “La verdadera grieta entre los pequeños productores está entre la concentración y la desaparición. Las medidas que ha impulsado el gobierno no modifican la matriz concentradora, para eso se necesita una reforma impositiva que sea progresiva, ley de acceso a la tierra, entre otras cosas. En Argentina los que más tienen pagan menos», dijo entonces Príncipe, haciendo referencia a los beneficios en el financiamiento que obtienen grandes productores en detrimento de sus pares menos afortunados.

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