El edil Jorge Boasso, manifestó ayer luego de la presentación que hiciera junto a sus pares Osvaldo Miatello, Diego Giuliano y Rodrigo López Molina que la prioridad de la discusión de los temas que acucian a la ciudad está sujeta al presupuesto (“Es más importante el presupuesto porque es el plan de gobierno para todo un año),” en tanto que el tema del boleto “es una contingencia, que siempre viene para ser discutida porque no se cambian los ejes de discusión por lo tanto me parece que primero presupuesto”.

Sobre la conferencia de prensa que protagonizaron ayer dijo Boasso que “estuvimos exponiendo durante 40 minutos, mostramos 26 diapositivas, trabajamos profundamente y demostramos la ineficiencia de esta administración, los defectos del presupuesto municipal” y a renglón seguido dio su posición que preanunció la prórroga de la sesión de la tarde de ayer para mañana. Boasso fue contundente: “No vamos a apoyar el brutal aumento de tasa que se proponen”.

En el mismo sentido, el concejal distinguió conceptos al afirmar “que va mucho más allá de cualquier concepto de ajuste por inflación, por eso nosotros le dijimos no a un aumento de tasas, y distinto es discutir un ajuste por inflación”.

Boasso agudizó el análisis y propuso “analizar cuál es el porcentaje de ajuste por inflación que sea el más razonable y adecuado para que no perjudique el bolsillo de los vecinos” y abundó: “Todos los años el municipio sumó más recursos que los años que le precedieron. Siempre recaudó más que los recursos que estaban en el presupuesto. Sin embargo, la deuda pública creció exponencialmente de 40 millones a 120”.

También trató de comparar con otros momentos de la intendencia: “El presupuesto participativo que era del 8 por ciento ahora es de 1,56 y los gastos corrientes como ningún otro municipio, pues tiene el 94 % de gasto corriente y sólo el 6% en bien de capital, así no se pudieron mantener las calles, no se pudo construir cloacas, tampoco pavimentos, de allí que los datos que dimos son preocupantes”. Y concluyó: “Esto demuestra que es una gestión socialista agotada, a la que hay que sustituir por una coalición distinta”.

Consultado si se podía focalizar el déficit en la concepción de la prioridad política que se le da a la orientación de los recursos o si es la mala ejecución de esa orientación, Boasso asumió que “las prioridades están aprobadas en los presupuestos y pasan por el concejo y nosotros las aprobamos, y nos hacemos cargo, el tema es que después se incumple la ejecución”.

El ejemplo no se hizo esperar: “Mostramos un cuadro donde están todos los fondos de afectaciones específicas, por ejemplo de obras públicas, nosotros aprobamos un monto y sólo se ejecutó el 29 %. A esto se lo llama subejecucion de fondos específicos, esto es un ejemplo de mala ejecución de un presupuesto que ha sido aprobado”. Y presenta otro caso: “Nosotros aprobamos la ordenanza del 8 por ciento del presupuesto participativo, y nos encontramos que este año solo se ejecuto el 1,56”.

«Los presupuestos que aprobamos son cheques en blanco para la intendencia, son dibujos»

Hubo un pedido de informe del edil que no fue considerado por la intendencia y deslizó: “Estoy pidiendo todavía por las 500 personas que van a pasar a planta permanente del año pasado a este, me interesa la lista, no los nombres, sólo saber cuándo ingresaron y qué función cumplen, para que no convirtamos en cargos de planta permanente a cargos que eran políticos y amigos del poder de turno”.

En referencia a la administración misma, dijo que hay “una conjunción de una mala administración, de una mala ejecución y de fijar prioridades”.

Interrogado desde qué fecha se elaboró el estudio propuesto a la ciudadanía aseveró que “se hicieron datos comparativos desde 2003, otros desde 2008 y otros desde la asunción de la administración Fein”.

En el marco del análisis, Boasso acompañó su crítica con cifras: “La intendenta aumentó la tasa el 200% en lo que va de su administración, y que si se aplica el 117 % acumulativamente al final de 2015 va a tener un aumento en su gestión de un 550%”.

En cuanto a la instrumentación de la ley de presupuesto, en donde si cada partida que fue asignada para un fin específico ésta fue subejecutada y hacia dónde se destinaron los fondos, el concejal informó que “fueron a rentas generales y engrosaron el 94 % de los gastos corrientes, que luego gastaron como quisieron”. Y remató afirmando que «por eso siempre digo que los presupuestos que aprobamos son cheques en blanco para la intendencia. Son dibujos como están conformados los presupuestos y como se aprueban son grandes fantasías».

Finalmente, sobre si también sería responsabilidad del Concejo modificar la legislación para ejercer un mayor contralor sobre la actitud discrecional del poder ejecutivo local sentenció: «No, lo que hay que cambiar es el gobierno de la ciudad de Rosario«.

Escuchar Audio:  El edil Jorge Boasso, diferenció entre aumento de tasa y ajuste por inflación y habló del incremento en la recaudación año a año, no obstante ello, se lamentó del endeudamiento del municipio y de la mala administración de los recursos.