El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, afirmó hoy que presentó una denuncia en contra del abogado Adrián Bastianes, uno de los impulsores de las marchas por Alberto Nisman, por la filtración de fotografías tomadas durante el procedimiento policial realizado en el departamento del fiscal, el día de su muerte.

«En la noche de ayer (sábado) he presentado al jefe de Policía Federal como Jefe de Gabinete una denuncia. Porque me parece una animalada, un desagrado absoluto que alguien se haga de esas fotos y las utilice. Entran en juego los artículos 255 y 153 del Código Penal en esas publicaciones», dijo el funcionario en diálogo con la radio Nacional Rock.

Sostuvo que «hay un derecho a que la familia y la propia víctima tenga el respeto y la dignidad que tenga que tener y que no sea utilizado desde el morbo».

«No se puede hacer eso bajo ningún punto de vista, hay una investigación que se está valiendo de esas fotos y videos y hay una familia que no tiene por qué ver esta aberración», aseveró el jefe de Gabinete y agregó: «Hay que tener un respeto por la persona, independientemente de que lo critiqué pero va por otra  vía».

Con respecto a su denuncia, dijo que Bastianes «es un señor que publica estas cosas y no es precisamente un periodista», por lo cual «no tiene ningún derecho a guardar fuente».

«Es un anti K desaforado, como le llaman ellos, ha aparecido en cuanta manifestación del Gobierno existe y está entre medio de todos los fiscales en la última marcha. Me interesa saber cuál es el objetivo que está persiguiendo este personaje que no tiene ningún derecho a hacer eso», cuestionó.

Aníbal Fernández dijo que no le interesa «la vida privada de Nisman, no si salía con señoritas, señores o burros», sino si «esa vida se hizo con dinero público».

«Aparece una denuncia del propio (Diego) Lagomarisno (el técnico informático que al parecer le prestó a Nisman el arma que acabó con su vida), de que le sacaba la mitad del sueldo, viajaba a la playa en primera con dos señoritas y no lo denunciaba ante el Ministerio Público. Entonces aparecía como que estuviera trabajando. La muerte no santifica a nadie y por eso hay que decir las cosas como son», aseveró.

Al respecto, señaló que «acá hay varios delitos: malversación de fondos públicos, cohecho, hay peculado, blanqueo de fondos» y dijo que «hay muchos delitos que tienen que ser investigados» y que lo está pidiendo «públicamente».

El sábado, la Policía Federal Argentina (PFA) ofreció sus «servicios de policía científica y de investigación de delitos tecnológicos» para «identificar a los autores de las filtraciones» de las fotos de Nisman.

La fuerza aseguró que «en ninguna oportunidad ha tenido acceso al expediente, ni ha guardado copias de los materiales documentales», descartando así que la difusión de las imágenes se haya originado por parte de los uniformados.

En los últimos días, se difundieron tanto imágenes de la vida privada de Nisman, como las que fueron tomadas durante los peritajes oficiales después de su muerte, incluida la del cuerpo sin vida del extitular de la Unidad Especial AMIA tendido en el baño de su departamento de la Torre Le Parc, en el barrio porteño de Puerto Madero.