Por Florencia Vizzi

La noche del 22 de noviembre un niño que jugaba junto a sus padres fue embestido por tres personas que iban en moto y quienes se desplazaban a alta velocidad en la zona de la costanera norte de Rosario. El pequeño, Santino Ángel, de sólo 5 años, sufrió lesiones graves en cuerpo y rostro, y fractura de tibia en la pierna izquierda.

Germán Ángel, padre del niño, brindó a Conclusión todos los detalles de los hechos. “Mi hijo juega en Torito, y esa tarde habían ganado el torneo que organizó la intendenta Mónica Fein en el Batallón 121. Así que entre todos los padres nos pusimos de acuerdo para agasajar a los chicos y compramos sándwiches y gaseosas y fuimos todos a cenar a la zona del río, más precisamente en costanera entre Puccio y Gallo, al lado de Natural Mystic. Nosotros estábamos en la vereda, sentados, y el nene estaba jugando al lado mío. De repente se nos viene encima una moto negra (una Guerrero 110, según figura en la denuncia), a toda velocidad, sobre la vereda, con tres muchachos, y lo atropellaron… me lo arrancaron de la mano, se lo llevaron puesto y lo pisaron como un perro”, relata con indignación.

denuncia-santino-angelEstas tres personas, siempre según el relato del padre del niño, se bajaron del vehículo, dejándolo tirado en el lugar, y salieron corriendo. “Entonces, la misma gente que estaba en la zona, algunos padres de amiguitos de mi hijo, indignados con la situación, corrieron detrás de ellos y lograron alcanzar a dos”, explicó el papá de Santino.

En la persecución intervinieron varios móviles de la Policía Federal, que se encontraban en la zona, quienes llevaron a los dos detenidos a la comisaría 10, donde permanecieron demorados y quedó radicada la denuncia, y donde se presentó el tercero de los conductores, al día siguiente, a intentar recuperar el vehículo, quedando también demorado por unas horas.

Germán llevó al niño por sus propios medios hasta el Hospital Alberdi, donde le realizaron una atención primaria, y luego lo derivaron al Hospital de Niños Zona Norte.

“A mí lo que me indigna es que los liberaron enseguida, como si la vida de mi hijo no importara, el fiscal ni siquiera habló conmigo. No nos llamó ni una vez para que cuente lo que pasó, para que le de datos de los testigos, que son más de 20, nada de nada. Tampoco vino nadie al hospital, se suponía que tenían que venir a hacer fotos del nene… no vino nadie, y estos tres tipos, a las pocas horas, ya estaban afuera, mientras mi hijo estuvo internado tres días, y ahora está en silla de ruedas y todo lastimado”, lamenta Germán.

Según informaron desde fiscalía, las personas demoradas fueron Ezequiel A. (19 años) y Luis Gabriel L. (19 años) en primer término y luego Gastón N. (16 años), quien es el que se presenta a reclamar la moto. A los dos mayores se les ordenó los análisis de rigor de sangre y orina, y el vehículo está siendo peritado.

El fiscal interviniente, José Luis Caterina, también se encuentra a la espera de los informes médicos del niño. Los conductores fueron dejados en libertad porque la causa está caratulada como “lesiones graves en accidente de tránsito” y ninguno de ellos tiene antecedentes.

“Pero un accidente no es en la vereda, es en la calle -señala Germán, indignado-  y nosotros estábamos en la vereda, tranquilos, tomando algo y comiendo… yo lo que quiero es que esto no sea otro caso más sin justicia, que a otro pibe no le pase lo mismo, y que estas personas no queden impunes”.