El juicio por el femicidio de la docente Vanesa Castillo, cometido en febrero de 2018, comenzó este lunes en los Tribunales de Santa Fe y las fiscales del caso adelantaron que pedirán la pena de prisión perpetua contra el acusado.

La fiscal Cristina Ferraro indicó antes de la audiencia que el imputado Juan Ramón C., de 32 años, «cometió un femicidio en contra de Vanesa Castillo (33) aquel 15 de febrero de 2018 al mediodía, cuando ella salía luego de una de las primeras jornadas del año de la escuela Victoriano Montes, de Alto Verde».

La fiscal recordó que cuando Castillo «se estaba retirando en moto fue atacada por esta persona, con ensañamiento y con alevosía, mediando un contexto de violencia de género», razón por la cual desde el Ministerio Público plantearán que se trató de un femicidio de los llamados «no íntimos».

El tribunal que tiene a su cargo el debate es integrado por la jueza Rosana Carrara y sus colegas José Luis García Troiano y Leandro Lazzarini.

El imputado está acusado de los delitos de homicidio calificado (por ser con alevosía y ensañamiento, y por mediar violencia de género, es decir, por femicidio), amenazas calificadas, agresión con arma y atentado a la autoridad, todos en concurso real.

La fiscal Ferraro, acompañada por su par Bárbara Llera, dijo que están solicitando «la pena más alta que prevé el Código, que es la prisión perpetua» por poseer «certeza absoluta que se ha cometido el hecho con estas características».

La Fiscalía sostiene que el acusado le ofreció venderle un calzado a Castillo y en momentos en que ella rechazó la oferta, él se acercó a su motocicleta y le pidió que lo llevara hasta una cancha de fútbol cercana.

«Luego de que la víctima se negara y mientras se subía a su motocicleta para volver a su casa, el acusado se abalanzó sobre ella, subió a la parte trasera del vehículo y le asestó numerosas puñaladas con un arma blanca en distintas partes del cuerpo», dijo Ferraro.

Castillo «quedó en una situación de indefensión total» porque el imputado «la sujetó con tanta fuerza y de tal forma que la mujer comenzó a conducir mientras pedía auxilio. Luego, chocó contra un montículo de tierra, cayó al suelo y el acusado se dio a la fuga».

Para las fiscales, «la agresión perpetrada se enmarca en un contexto de violencia de género» porque el hombre «no aceptó la libre decisión de la víctima de negarse a los requerimientos que le realizaba y al pretender que podía imponerle su voluntad por su sola condición de mujer, actuó con extrema violencia física hasta provocarle la muerte».

Voceros judiciales informaron que la madre y la hermana de Castillo, en representación de la hija menor de edad de la víctima, se constituyeron como querellantes y estarán representadas por la abogada Carolina Walker Torres.