Tamara Beatriz Cortez, una joven de 25 años y embarazada de ocho meses que vivía en la localidad bonaerense de Monte Chingolo, fue asesinada – el jueves por la noche – con un disparo que impactó en su pecho. Pese a que su pareja dijo haberla encontrada fallecida en la habitación, quedó detenido.

El repudiable hecho ocurrió anoche en una casa de la calle Blas Parera al 800 de esa localidad del partido bonaerense de Lanús, en la zona sur del conurbano. Según las fuentes, en principio había sido el ahora detenido quien fue a la comisaría a denunciar que había encontrado muerta a su pareja. Pero los testimonios de los vecinos  indican que se escucharon gritos provenientes de una discusión y luego un disparo.

La víctima fue identificada como Tamara Cortez, tenía 25 años y cursaba un embarazo de ocho meses. En cuanto al femicidio, se constato que tuvo lugar en la vivienda en la que ambos convivían. El ahora detenido y acusado de femicidio fue identificado como Germán P, de 28 años.

La causa, ahora caratulada como femicidio, investiga ahora las circunstancias del hecho. En este sentido, las fuentes consultadas indicaron que la discusión entre ambos previa al femicidio se habría originado por la decisión de la joven de separarse a raíz de los maltratos a los que era sometida por parte de su pareja.

Las primeras investigaciones indican que luego de efectuarle el tiro en el pecho a su pareja, se retiró de la vivienda e intentó una coartada para justificar el crimen y demostrar que supuestamente no estuvo presente en el momento en que ocurrió el hecho. Según pudieron establecer los investigadores, Germán P salió durante unos 15 minutos del departamento, volvió y llamó al 911. Cuando los efectivos de la Comisaría 6ta llegaron, les intentó explicar que Tamara se había suicidado.

La fiscal Soledad Garibaldi, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°8 del Departamento Judicial de Lanús-Avellaneda, quedó a cargo de la investigación del caso, quien trabajó en conjunto con varios efectivos de la comisaría 6ta.