A 13 años, los santafesinos recuerdan trágica inundación

Organizaciones de damnificados por las inundaciones sufridas en Santa Fe en 2003 conmemorarán hoy el décimo tercer aniversario del inicio de la crecida del Río Salado, que causó 158 muertes. Con un acto frente a la Casa de Gobierno de la provincia reiterarán su pedido de justicia.

Los manifestantes se concentrarán en la Plaza del Soldado Argentino desde las 17 y desde allí marcharán hasta la Plaza 25 de Mayo, donde se realizará el acto de recordación de las víctimas, a las 18.30, según confirmaron miembros de las dos entidades organizadoras: la Carpa Negra y la Marcha de las Antorchas.

«Como siempre, leeremos los nombres de las víctimas y reiteraremos el pedido de justicia porque llevamos 13 años de impunidad, denunciando la complicidad de los inundadores con la Suprema Corte de Justicia santafesina, que protege a los culpables y les da la espalda a las verdaderas víctimas», dijo María Claudia Albornoz, de la Carpa Negra, a la agencia Télam.

En que refiere a la causa judicial por las víctimas de la crecida, están imputados por estrago culposo agravado por la muerte de 18 personas el ex intendente de Santa Fe, Marcelo Álvarez; el ex ministro de Obras Públicas provincial, Edgardo Berli, y el ex director de Hidráulica provincial, Ricardo Fratti.

Dicha causa está virtualmente frenada por reiteradas apelaciones de la defensa de Álvarez, mientras el juez Octavio Silva está a la espera de que se definan quiénes van a ser los jueces que van a resolver el último planteo de prescripción que presentó Pablo Guastavino, el abogado del ex intendente.

La tragedia tuvo lugar el 29 de abril de 2003, cuando las aguas del río Salado ingresaron abruptamente por un sector inconcluso del terraplén de defensa, en inmediaciones del hipódromo, lo que causó estragos en un tercio de la ciudad, especialmente en los barrios situados al sur, oeste y norte.

Existe discrepancia respecto del número de víctimas fatales, ya que el entonces gobernador provincial Carlos Reutemann reconoció un listado oficial de 23 muertos, pero la Casa de Derechos Humanos de Santa Fe reveló posteriormente 158, incluyendo también personas fallecidas por causas vinculadas a la crecida y que fueron denominadas «secueladas».

Las organizaciones de inundados reclaman además que sea juzgado Reutemann, basándose en el hecho que la causa incluye 35 testimonios, entre ellos los de los peritos oficiales, que señalan que el agua ingresó por una defensa inconclusa -aunque inaugurada en un acto oficial- y que la orden de evacuación debió ser dada como mínimo un día antes.

Uno de los actores civiles de la causa, Jorge Castro, aseguró: «Hay material probatorio suficiente para iniciar una causa paralela y poder pedir el desafuero y llamar a indagatoria a Carlos Reutemann». Otra de las pruebas fundamentales en la causa es el contenido de la pericia oficial elaborada por los ingenieros Jorge Bacchiega, Juan Carlos Bertoni y Jorge Maza.

En el mismo se indica que el agua ingresó ante «la inexistencia de un cierre integral de la región Oeste-Norte que permitiera cerrar el anillo de defensa con una cota tal que brindara un nivel de protección homogéneo a todos los sectores de la ciudad», y además pone énfasis en la «errónea concepción del proyecto de terminación del tramo II (de la defensa) y la previsión de una medida de cierre de emergencia de difícil ejecución una vez configurada ésta última».

Esa obra de defensa fue licitada durante la primera gobernación de Reutemann e inaugurada durante la primera gestión del ex gobernador Jorge Obeid, aunque de manera inconclusa, ya que se construyeron sólo dos de los tres tramos y por el faltante ingresó el grueso del agua del Salado.