Diferentes sectores e industrias a través del mundo se vieron afectadas en gran medida por la pandemia del coronavirus, y a raíz del confinamiento obligatorio que se lleva adelante en todas las ciudades de los diferentes continentes.

Ibiza, la capital del ocio y el turismo, no quedó ajena a esta realidad, y sus más de cien mil habitantes, vieron afectada su economía debido al cierre de fronteras e ingreso de turistas.

Esta isla de ensueño, la cual se caracteriza por poseer espacios de entretenimiento del más alto nivel, hoy se encuentra imposibilitada de explotar su industria turística y recibir a aquellas personas ávidas de diversión.

Germán Dragone es un artista argentino que vive allí hace algunos años y, en dialogó con Conclusión, cuenta cómo es la situación de la ciudad del jolgorio.

Al consultarle sobre cuáles son las cifras oficiales del Covid-19 en la isla, Dragone señaló que «por el momento está todo muy controlado y la gente es muy aplicada a las normas. Si bien en comparación con el resto de España estamos mucho mejor, ya que en el día 34 del confinamiento hay un poco más de 90 casos activos y 16 muertos. No es mucha gente contagiada, teniendo en cuenta que hay 100 mil habitantes en la isla».

Agregó que «la situación es mejor debido a la geografía de la isla. Está el mar cerca, en un marco de montañas, tipo campo. Dentro de todo y de alguna manera, se vive tranquilo».

En relación al marco laboral, Dragone explicó que «la isla, básicamente, se mueve con el turismo. Se vive del turismo y, aparentemente, hasta septiembre no va a haber vuelos comerciales, y es una preocupación. Solamente va haber turismo interno, es lo que se habla. Va ser verano, pero sin temporada«.

«Los que teníamos ahorros estamos viviendo con eso y otras personas la están pasando como pueden. Hay muchas familias numerosas y eso es alarmante. Los diarios hablan de la mayor crisis que hayamos conocido los que estamos vivos. Estamos esperando una tasa alta de desempleo, según los medios, de un 35%«, añadió el músico argentino.

Y concluyó: «Sería importante que de esto saquemos algo positivo, y que tratemos de mejorar todo aquello que nos haga bien como persona y para la sociedad».