MARTES, 26 DE NOV

Rosario está «en condiciones óptimas» para recibir vuelos internacionales y podrían darse a partir de fin de año

El director del Aeropuerto Internacional Rosario, Eduardo Romagnoli, contó que el gobernador Omar Perotti elevó una solicitud a la presidencia para que se considere a la ciudad como un corredor seguro, posibilitando el regreso de aerolíneas extranjeras. Copa y Gol serían de las primeras.

 

En el marco de las distintas aperturas que se dan a nivel nacional con respecto a arribos y salidas de argentinos y extranjeros al país, el director del Aeropuerto Internacional Rosario «Islas Malvinas», Eduardo Romagnoli, contó hoy que la ciudad podría comenzar a recibir vuelos internacionales “en diciembre, tal vez enero”.

En ese sentido, en declaraciones a la prensa contó que “hace aproximadamente 15 días el gobernador Omar Perotti elevó a la Jefatura de Gabinete de la Presidencia de la Nación la solicitud” para que Rosario se considere “un corredor seguro” y puedan regresar las aerolíneas internacionales a operar desde el aeropuerto.

De igual manera, Romagnoli reveló que la negociación con las aerolíneas que cubren rutas internacionales “está muy avanzada” para que, por ejemplo, “en el momento de la liberación tanto Copa como Gol retomen las rutas que estuvieron cubriendo hasta marzo de 2020”.

“Hay decisiones que no queremos tomar de manera apresurada. Hemos trabajado con el Ministerio de Salud y el de Seguridad de la provincia de Santa Fe, con algunas oficinas de la Gobernación santafesina, para estar absolutamente seguros de que los protocolos que íbamos a implementar antes de retomar estas rutas eran los mejores, los más apropiados. Después de dos meses de trabajo, es una decisión unánime que tomamos hace 15 días: estamos convencidos de que si tenemos que destruir o desarmar algún área del aeropuerto para generar espacio, para garantizar distanciamiento, para mejorar la circulación, lo vamos a hacer. Y lo hicimos. Hoy estamos en una etapa en la que ya definimos qué tipo de estructuras complementarias y transitorias vamos a instalar en el exterior del aeropuerto”, expresó con entusiasmo ante los medios el titular del aeropuerto rosarino.

 

Luego, remarcó: “Hemos negociado con las aerolíneas, estamos en una situación óptima como para retoma y nuestro gobernador elevó la solicitud como para que nos autoricen a recibir este tipo de operaciones”.

En cuanto desde Nación se dé el visto bueno a la autorización que solicitó el gobernador Perotti, el aeropuerto acordará con cada empresa en particular el regreso de sus respectivos vuelos.

Desde el momento en que se llega a ese acuerdo, según detalló Romagnoli, “la aerolínea necesita como mínimo 60 días para poner cada una de las máquinas en situación operativa para que puedan volver a funcionar”, y es por eso que una vez dada la autorización nacional “las aerolíneas tendrán 45 o 60 días para prepararse”.

“Esto nos ubica a nosotros en una situación temporal de fin de año, diciembre, tal vez enero”, dijo el titular, pensando en el retorno de las aerolíneas internacionales a la ciudad.

Consultado por la decisión de la aerolínea Jet Smart de cancelar su ruta Rosario-Neuquén, que contaba con dos frecuencias semanales, el director del «Islas Malvinas» dijo que «son decisiones comerciales, únicamente».

«En esta industria hablamos de un nivel o tasa de ocupación de asientos que debe tener una aerolínea para poder cubrir una ruta. Ese índice nos dice que cualquier aerolínea que trabaja con menos del 70%, trabaja a pérdida. Tenemos una gran aerolínea, Jet Smart, que ha estado cubriendo una ruta muy importante y todavía lo está haciendo, que durante toda la etapa pandémica estuvo volando a Neuquén con el 50% o menos de esos asientos ocupados. Entonces, una compañía puede asumir un quebranto durante un tiempo determinado. Nosotros hemos hecho muchas gestiones, hemos intentado la compra de pasajes anticipados, de sensibilizar a quienes puedan utilizar esos vuelos a futuro, 2022, 2023, pero en esta situación no hay nada que pueda ayudar a la aerolínea a seguir volando cuando los quebrantos son tan grandes. Tampoco está en nuestra cabeza salir a subsidiar este tipo de operaciones, preferimos que los recursos de subsidios vayan al área de salud o de educación, y nosotros esperaremos e iremos negociando con las aerolíneas low cost pensando en 2022 o 2023. La realidad se asienta en que hay una ecuación económica que a la compañía la lleva a decir ‘no puedo seguir operando esta ruta a pérdida'», describió.

Las declaraciones de Eduardo Romagnoli se dieron en el marco de un acto en el Aeropuerto, donde estuvo acompañado por la ministra de Salud santafesina, Sonia Martorano, la directora de la Agencia de control del Cáncer, Graciela López Degani, y miembros de Lalcec y el instituto Iunir, en el marco del Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Mama.

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