MIéRCOLES, 27 DE NOV

Olor nauseabundo por aguas servidas, inseguridad y falta de transporte: así viven en barrio 7 de Septiembre

Los vecinos indicaron que además de la presencia de aguas servidas -que causaron enfermedades a algunos habitantes-, las calles de este barrio rosarino presentan baches tan profundos que los colectivos no circulan por el lugar. Además, hay poca iluminación.

 

Hace meses que los vecinos de barrio 7 de Septiembre -ubicado en el noroeste rosarino- vienen reclamando por el colapso de las cloacas y por la presencia de agua servida en las calles y veredas. Como si esta problemática no fuera suficiente, ahora también se agregan la falta de iluminación, la inseguridad y el deteriorado estado de las calles, que hace que los colectivos cada vez circulen menos por el lugar.

Luego de que en la tarde del pasado lunes los vecinos realizaran una manifestación entre las calles Ayala Gauna y Tarragona, este martes Conclusión se acercó al lugar para conocer a fondo las situaciones que padecen en el barrio, relacionadas a los desbordes cloacales, a la inseguridad y a la poca iluminación y circulación de colectivos. 

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“Estamos pidiendo que nos ayuden a solucionar el tema de las cloacas, además, ya no tenemos por donde pasar con el colectivo. Nunca hubo una respuesta por parte de la Municipalidad, y si la hubo, hicieron parches que no duraban ni un mes y ya teníamos otra vez el pozo. Con el tema de las cloacas, vienen y destapan, pero no alcanza. En el barrio hay mucha gente viviendo y las cañerías no aguantan”, explicó una vecina.

En esta línea, otra vecina agregó: “Hay momentos donde el agua está servida por todas partes y tenemos que caminar dos cuadras para cruzar la calle. No se puede vivir así, el olor llega hasta adentro de las casas. Es una vergüenza, hace 37 años que vivo en el barrio y nunca estuvo tan abandonado como ahora”.

“Los colectivos no pueden pasar porque las calles están rotas. Cuando hacemos el reclamo nos dicen que primero tienen que arreglar las cloacas. En calle Schweitzer los pozos deben tener entre 60 y 80 centímetros de hondo, no puede pasar más nadie ahí. Lo que nos indigna es que la calle San Martín, del centro, fue refaccionada dos veces en los últimos años, y de los barrios no se ocupan. Rosario no es el centro nomás. Los barrios estamos olvidados”, completó otra habitante de barrio 7 de Septiembre.

A su turno, otro vecino que vive hace más de 30 años en el lugar señaló: “Me gustaría que los concejales se acerquen a los barrios así le reclaman al intendente lo que pasa. Acá hay días que no se pueden respirar. Estamos desprotegidos y abandonados”.

Vecinos de barrio 7 de Septiembre.

Finalmente, una vecina apuntó contra las obras realizadas por la Municipalidad de Rosario para solucionar el problema de las cloacas: “Vinieron, cambiaron el caño, lo dejaron dos meses abierto, vino una lluvia torrencial y se llenó de agua. Vinieron al otro día, vieron que estaba lleno de agua, pero igual mandaron el material, el caño se hundió y otra vez lo mismo”.

Más allá de que después de la manifestación del pasado lunes ninguna autoridad se acercó a dialogar con los vecinos, uno de ellos se contactó a través de las redes sociales con el intendente Pablo Javkin, quien respondió que a la brevedad iniciarán obras para solucionar el problema cloacal y, posteriormente, se dará lugar a la reparación de pavimento.

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