Por Ariana Robles

En un día frío, pero soleado, el acto del Día de la Bandera en Rosario fue distinto. Fue la primera vez que la celebración de esta fecha no tuvo desfile cívico y se dio con un escueto acto central encabezado por el presidente Mauricio Macri, que se limitó al izamiento de la enseña patria en el mástil mayor del Monumento.

En este marco, la fisonomía del centro cambió durante las primeras horas de la mañana. Con un gran despliegue de seguridad se valló un radio de 300 metros del Monumento a la Bandera, al que sólo se podía acceder con acreditación. Se abrió al público después de que se retiró Macri, quien luego de su participación en el acto oficial visitó a una familia del barrio Cinco Esquinas.

Durante su discurso, el presidente resaltó que el prócer Manuel Belgrano «es una verdadera fuente de inspiración» para el lema «¡sí, se puede!», enarbolado por Cambiemos, en lo que tiñó su discurso a la política.

“No se dejó atrapar por reglas arcaicas y tradiciones de España y las colonias. Siempre fue un adelantado: creyó que el trabajo ligado a la educación de calidad era la forma de desarrollar nuestra Nación», sostuvo el mandatario.

Durante la conmemoración, el mandatario estuvo alejado del pueblo rosarino, ya que desde Casa Rosada dispusieron que el público no pueda acercarse a menos de 300 metros de Macri. El presidente habló al pie del mástil y resaltó algunas de las medidas tomadas por el gobierno nacional, aunque reconoció que «hay mucha gente que no percibe este camino de mejora».

«Pero estos resultados positivos que ya hemos tenido nos tienen que servir para renovarnos en la esperanza y comprometernos una vez más a trabajar juntos, porque juntos es como vamos a lograr ese país grande y pujante que Belgrano soñó y que hoy la mayoría soñamos», destacó.

Y agregó: «Por eso, los invito a que sigamos por este camino del progreso». En ese sentido, definió al creador de la bandera «incansable trabajador por el futuro de la Nación: innovador, emprendedor» que «trabajó incansablemente para modernizar la educación»

«Como nosotros hoy, también le dio un valor importantísimo a la infraestructura. Nunca se cansó de hacer, porque creía que en el hacer estaba la solución a los problemas diarios. Es una verdadera fuente de inspiración para lo que llamamos ´¡sí, se puede!´», destacó.

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