Intensifican los controles y prometen dureza con organizadores de fiestas y eventos clandestinos

En el marco de las nuevas disposiciones normativas en relación a las restricciones horarias de circulación en la ciudad y la provincia, que comenzaron a regir a partir de las cero horas de este lunes, se desarrolló una importante reunión entre autoridades provinciales y municipales, miembros del Ministerio Público de la Acusación, de las fuerzas de seguridad y del Ministerio de Seguridad a fin de establecer las pautas de control del cumplimiento del decreto provincial firmado por el gobernador Omar Perotti el pasado sábado. Los funcionarios presentes dejaron muy en claro que serán implacables en la aplicación de la nueva normativa y que pondrán el foco, particularmente, en quienes se dediquen a la organización de eventos y fiestas clandestinas sobre los cuales caerán con todo el peso de la ley.

Del cónclave, que finalizó con una conferencia de prensa, participaron el intendente rosarino, Pablo Javkin, el subsecretario de Prevención y Control Urbano de Santa Fe, Alberto Mongia, el fiscal Luis Schiappa Pietra e integrantes de la Prefectura Naval, la Policía de Santa Fe y la Policía Federal.

El intendente de Rosario remarcó que se intensificarán los controles, no sólo sobre la circulación nocturna, sino sobre las actividades, a veces masivas, de violación de cuarentena. «No sólo hablamos del territorio provincial, sino que también estamos en contacto con el gobierno de Entre Ríos, porque queremos intervenir con más efectividad en lo que está sucediendo en islas», apuntó Javkin.

«Tenemos que continuar cuidándonos hasta que la vacunación complete su ciclo y la coordinación de todos los niveles del Estado es fundamental. Los controles van a ser en el marco de los decretos nacional y provincial que incorporan actuaciones en base al código penal y no sólo sanciones administrativas», explicó el mandatario municipal.

En ese sentido, el fiscal Luis Schiappa Pietra señaló la importancia de las tareas investigativas y apuntar, sobre todo, a quienes se encargan de la organización de fiestas y eventos clandestinos.

«Estamos trabajando en varias investigaciones y las consecuencias de las mismas pueden ser secuestro de vehículos, aprehensión y detención de personas, fundamentalmente de quienes están detrás de la organización de este tipo de actividades y también, eventualmente, si hay posibilidad de alcanzar la recaudación o los instrumentos que se utilizaron para la organización», detalló el fiscal. «En ese sentido es importante poder investigar y dar cuente de la totalidad de la estructura con la que cuentan quienes organizan estos eventos que muchas veces no son alcanzadas por las fuerza penales».

El funcionario fue categórico y subrayó que la intención es ir con todas las herramientas que la ley le provee, sobre todo, contra quienes están involucrados en la cuestión organizativa. «No vamos a ser flexibles. Tenemos noticias que en algunos casos, se han montado lugares  y grupos para comercializar las entradas de las fiestas. Lo importante es ser efectivos y eficaces en la aplicación de la ley», remarcó.

Schiappa Pietra recordó que anteriormente han habido causas e investigaciones que ya están en curso y explicó que «la idea ahora es intensificar y poder alcanzar a todos los niveles de organización de este tipo de eventos».

En cuanto al tipo de sanciones, el funcionario judicial manifestó que difieren de acuerdo al nivel de responsabilidad en la participación. «No es lo mismo una sanción que se pueda aplicar a alguien que trabaja de organizar eventos ilegales que la que se puede aplicar a quien concurre al evento. Lo que queremos dejar en claro es que vamos a ser muy duros con los que montan y organizan estas actividades porque el daño que hacen es muy grande».

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Por su parte, el subsecretario de Prevención y Control Urbano de Santa Fe, Alberto Mongia, refrendó lo dicho por Schiappa Pietra. «Como dijo el fiscal, se apunta principalmente a que se entienda la responsabilidad diferencial. Por ejemplo, los taxis clandestinos que cruzan gente a las islas o los organizadores de fiestas clandestinas tienen una responsabilidad mayor, y vamos a hacer lo posible para que queden procesados y que se cumpla fuertemente con la ley. Duramente vamos a ir por ese tipo de personajes. No se pude plasmar una política pública si tenemos actores que no colaboran en nada».

En cuanto a los controles nocturnos, Mongia recalcó que «no se intenta lesionar ningún derecho, sino hacer cumplir los decretos».