La decisión repentina del Grupo Indalo Media de cerrar el diario El Ciudadano trajo consigo una fuerte preocupación en la ciudad que en los recientes días se vio manifestada en mensajes de apoyo y solidaridad. En esta oportunidad, fue el Concejo Municipal quien se sumó a la causa y expresó su apoyo para con los más de 80 trabajadores que ven en riesgo su fuente de trabajo.

Los ediles aprobaron el expediente sobre tablas por unanimidad, y expresaron manifestar “su preocupación por el inminente cierre del diario El Ciudadano”, en una situación que “de concretarse atentaría contra la pluralidad y diversidad de fuentes de información y opinión”.

De igual manera, también pronunciaron “el deseo de continuidad del medio”, expresando su apoyo a los trabajadores de prensa que ven en riesgo sus puestos de trabajo.

El Ciudadano fue creado en 1998 por el empresario de medios Orlando Vignatti, con el espíritu de competir con el diario líder de la región, La Capital. Con el transcurrir de los años atravesaron momentos de crisis, como así también la propiedad del mismo fue cambiando de composición y dueños llegando en la actualidad a pertenecer en un 60% al Grupo Indalo Media y en un 40% a Vignatti.

En 2014, el matutino fue comprado por el conglomerado empresarial Grupo Indalo Media dirigido por Cristóbal López, junto con las publicaciones Ámbito Financiero y el Buenos Aires Herald.

El Sindicato de Prensa Rosario (SPR) informó que el Grupo Indalo tomó la decisión de cerrar el diario, donde trabajan 82 personas. A raíz de esta decisión es que los trabajadores se declararon en asamblea permanente, velando por sus intereses, las indemnizaciones y aportes patronales que les corresponderían en caso de cerrar, alertas a las negociaciones.

Por el momento los trabajadores no han recibido ningún telegrama ni notificación formal sobre la finalización de sus labores aunque la empresa se comprometió ante el Ministerio de Trabajo a abonar las indemnizaciones, sobre las cuales el Sindicato está discutiendo detalles.

A pesar del contexto y del estado de asamblea, los trabajadores del medio gráfico siguen cumpliendo tareas, ya que el diario va a seguir saliendo hasta que se firmen los acuerdos correspondientes, situación que posiblemente se concrete antes de fin de mes de octubre.

A su vez, por el momento no hay grupos interesados en la compra del diario, por lo que es inminente su cierre. Ésta es una situación alarmante para la ciudad, tanto por el peligro de pérdida de fuentes de trabajo como por el posible cese de circulación del segundo matutino más importante de la ciudad, limitando las fuentes de información ciudadana y la pluralidad de voces.