La Secretaría de Control en conjunto con la Policía desactivaron una fiesta clandestina en el interior de una obra en construcción. Sucedió en la noche del sábado luego de que se dieran reclamos de vecinos por ruidos molestos en el sector de Balcarce al 100, pleno centro rosarino.

Cuando los agentes de Control y el personal policial arribaron al lugar, constataron la presencia de unas 200 personas, las cuales fueron desalojadas y así el evento fue disuadido.

También te puede interesar: Fuga de gas en Pichincha: hubo fuerte alarma pero ya está controlado

«Bregamos todos los días y a toda hora por el cumplimiento de la norma. Con acciones rápidas y certeras pudimos intervenir y devolver el descanso a los vecinos del barrio y el resguardo a los asistentes. Es bueno que la ciudadanía sepa que puede contar con nosotros», afirmó Diego Herrera, secretario de Control y Convivencia municipal.

La fiesta electrónica se estaba desarrollando en el segundo piso de un edificio en construcción sin final de obra, lo que supone además de las molestias ocasionadas por los ruidos, una situación de riesgo para los asistentes.

También se hallaron equipos de sonido y dos barras con cajas de bebidas alcohólicas. Todos los elementos fueron incautados y quedaron a disposición del Juzgado de Faltas.