Meta, antes Facebook, se está enfocando en cambiar su imagen y comenzará a limitar a los anunciantes dentro de su red social, Facebook, para que no se puedan generar campañas pagas utilizando rasgos sensibles.
Estos rasgos sensibles tienen que ver con el estado de salud, ideología, etnia, política, religión y orientación sexual. Estos cambios se producirán a partir del próximo año, por lo cuál Meta comenzará a retirar las etiquetas que permitan dirigir la publicidad basándose en este tipo de segmentación.
No se ha especificado la cifra exacta pero se estima que hay miles de este tipo de etiqueta, que no son ni más ni menos, que información que Facebook fue recolectando por medio de la interacción que realizan los usuarios dentro de la plataforma social.
La publicidad dirigida ha sido, desde los inicios de Facebook, uno de los pilares del negocio de la empresa. Sin embargo, esta utilización de los datos de sus usuarios le ha acarreado no pocas críticas a la compañía. Facebook ha sido acusada, por ejemplo, de permitir a los anunciantes crear publicidad específica con criterios racistas en base a la actividad de los usuarios en la plataforma.
En el 2019 Facebook tuvo varias denuncias por permitir campañas publicitarias discriminatorias. Según los denunciantes, la empresa estaba amparando publicidad discriminatoria en anuncios de viviendas, ofertas de trabajo y créditos bancarios. Con esta nueva política publicitaria, la empresa quiere desmarcarse de estas acusaciones.
Ante este tipo de denuncias y de ser acusada como una empresa que no respeta la privacidad de sus usuarios, Facebook ha decidido tomar cartas en el asunto para empezar a suprimir todas las etiquetas de contenido sensible.
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Hace poco tiempo, también anunciaron que que dejan de lado su sistema de reconocimiento facial; otro indicio más en el cuál buscan mejorar su imagen y dejar de ser una compañía que espía a sus usuarios.
Desde la compañía aseguran que sus nuevos criterios publicitarios no se basan en el aspecto físico de los usuarios ni en sus decisiones personales. Tal y como han explicado, la publicidad en las plataformas estará dirigida únicamente a partir de la actividad de los usuarios en las redes sociales.
Este anuncio llega pocas semanas después de las revelaciones de los conocidos como «Facebook Papers». Una investigación periodística del Wall Street Journal hizo públicas una serie de prácticas internas de la empresa que dejan en muy mal lugar a Mark Zuckerberg.
