Al menos nueve civiles, varios de ellos niños, murieron en un bombardeo de la coalición militar árabe, que encabeza Arabia Saudita, contra un edificio residencial en la ciudad de Amrán, en el norte del Yemen, informaron fuentes locales.

El ataque realizado con tres cohetes dejó también varios heridos, informó un oficial de la policía local citado por la agencia de noticias EFE, que agregó que una niña permanece aún desaparecida bajo los escombros de la vivienda de una planta, que integraba tres departamentos.

Amrán, capital de la provincia homónima y en manos del movimiento rebelde de los hutíes, está situada a 50 kilómetros al noreste de la capital Sanaá.

El objetivo del ataque era un cuartel de la Brigada Blindada 310, controlado por los hutíes, que solo está separado por una calle de la vivienda bombardeada, aseguraron testigos que acudieron al lugar para ayudar a levantar los bloques de hormigón del techo destruido y participar en las labores de salvamento.

El rescate se retrasó hasta primera hora de la mañana debido a la continuación de los bombardeos de la aviación árabe, que disparó cohetes contra las ambulancias que se dirigieron a la zona poco después del ataque.

Otros dos ataques aéreos de la coalición militar destruyeron una escuela cercana, agregó el responsable policial sin citar víctimas.

El conflicto estalló cuando el movimiento rebelde de los hutíes ocupó en septiembre de 2014 la capital yemení y otras provincias del norte y centro del país, por lo que el presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, huyó a la ciudad meridional yemení de Adén y de ahí a Riad, donde reside junto a los integrantes de su Gobierno.

La guerra escaló de modo significativo en marzo de 2015, cuando Arabia Saudita a la cabeza de una coalición árabe, integrada por todos los países del Golfo menos Omán y respaldada por Estados Unidos, intervino directamente en el conflicto en favor de Hadi.