Las autoridades chinas detectaron hoy una mancha de petróleo de 18,5 kilómetros de largo en la zona donde ayer se hundió el petrolero iraní Sanchi, mientras continúa la investigación del siniestro.

Técnicos de la Administración Estatal de Océanos estudian el alcance del derrame, procedente del petrolero, que transportaba 136.000 toneladas de petróleo condensado, indicó la televisión estatal CCTV.

Una parte de ese cargamento ardió durante el incendio que consumió durante una semana el buque, tras una colisión con un mercante el pasado 6 de enero en aguas del Mar de China Oriental.

Por otra parte, técnicos chinos estudian ya la caja negra del petrolero, que rescataron del buque poco antes de su hundimiento.

«Creemos que la caja negra ayudará en la investigación de las causas del accidente», señaló hoy en rueda de prensa el portavoz del Ministerio chino de Asuntos Exteriores, Lu Kang.