Simpatizantes del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, volvieron a reclamar hoy en Brasilia una “intervención militar” a los poderes Legislativo y Judicial, en una nueva jornada de manifestaciones callejeras a favor y en contra del mandatario.

Los bolsonaristas realizaron sus actos frente al palacio del Planalto (sede del gobierno) y al Cuartel General del Ejército, con sus ya habituales pancartas y consignas a favor de una “intervención militar” y el cierre del Congreso y los tribunales.

Esas manifestaciones fueron similares a las que semanas atrás originaron una investigación en el Supremo Tribunal Federal (STF, corte suprema) y el arresto de seis simpatizantes de Bolsonaro que dispararon fuegos artificiales contra la sede de esa institución judicial.

La investigación incluyó allanamientos y el levantamiento del secreto bancario a dirigentes políticos y empresariales sospechados de haber financiado las protestas.

Uno de los líderes de la demostración de hoy frente al Cuartel General del Ejército fue el youtuber Emerson Teixeira, uno de los investigados por el STF, según la agencia de noticias EFE.

Esas manifestaciones coincidieron con muchas otras en contra de Bolsonaro y con la publicación de una encuesta de la firma privada Datafolha según la cual el apoyo de los brasileños a la democracia como mejor forma de gobierno aumentó a 75%, su nivel más alto desde septiembre de 1989.

Paralelamente, en diversas ciudades de Brasil y del exterior se realizaron decenas de pequeñas marchas que reclamaron “basta” a Bolsonaro y a su política “negacionista” de la gravedad de la pandemia de coronavirus, así como la apertura de un juicio político al mandatario.

La Central Unitaria de los Trabajadores (CUT), la mayor confederación sindical de Brasil, afirmó que hubo protestas en cerca de 70 ciudades en 24 países.

Con más de 1,3 millones de casos confirmados y de 57.000 muertes por la enfermedad, según su último balance oficial -divulgado anoche-, Brasil es el segundo país más castigado por la pandemia en todo el mundo.