El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, recibió este jueves a su sucesor electo, Santiago Peña, en un encuentro del que ambos destacaron que marca el fin de un período de enfrentamientos internos y el camino formal de inicio hacia una transición ordenada hasta agosto, cuando se hará el recambio de autoridades.

“Quiero destacar que a los dos nos envuelve un ánimo de cordialidad; hemos dejado atrás las diferencias políticas que son normales en el ejercicio de la política. La democracia hoy lo que nos pide y espera el pueblo es que podamos trabajar en beneficio de ellos. Yo quiero, presidente, agradecerle este gesto”, resaltó Peña frente a la prensa.

Ganador de la compulsa del 30 de abril, Peña admitió que hubo “a lo largo de los últimos tiempos unas internas duras, un proceso político electoral que por momentos puede ser de una intensidad que genera preocupación”, pero dejó en claro que hoy la “responsabilidad es la de paz y tranquilidad a todos los paraguayos”.

El futuro mandatario explicó que no fue una charla puntillosa por área, sino una conversación “general”, pero que se comprometieron a “no tener intermediarios” ante dudas y preocupaciones.

Por su parte, Abdo Benítez consideró que el encuentro abre oficialmente el periodo de transición, aunque la semana pasada ya había designado por decreto el comienzo de las gestiones y designado a su equipo para esa tarea.

“Creo que la presencia del presidente electo robustece el espíritu democrático de la nación paraguaya, demuestra un compromiso por sobre las coyunturas políticas momentáneas. Esta reunión es una muestra de un compromiso con la profundización de nuestra democracia y la capacidad de reencuentro que tenemos que construir los paraguayos para trazar un destino común para nuestra nación en beneficio de nuestro pueblo”, remarcó Abdo Benítez.

En su cuenta de la red Twitter, Abdo Benítez se expresó en términos similares: “Nos reunimos con el presidente electo Santiago Peña. Le transmití mis deseos de éxitos en el gran honor y desafío que es gobernar el país y reafirmé la vocación de trabajar en una transición armónica y ordenada”.

Peña hizo lo propio en su cuenta: “Conversé con el Presidente Abdo Benítez. Hablamos de los desafíos que tiene el Paraguay y de nuestro deseo de que el proceso de transición avance de forma ordenada y transparente”.

Del encuentro participaron también el vice electo, Pedro Aliana, y los dos responsables de de los equipos de transición, el jefe de Gabinete, Hernán Huttermann, por el Ejecutivo, y Lea Giménez y José Alberto Alderete por el futuro Gobierno.

El encuentro coincidió además con la designación de parte de Peña del futuro canciller, el economista Rubén Ramírez, que ya estuvo a cargo de la cartera de Relaciones Exteriores durante la presidencia de Nicanor Duiarte Frutos.