Por Hermes Lavallén

No solamente importa la cantidad de tiempo que pasamos durmiendo, también es importante la calidad del sueño. Cuando el sueño es interrumpido o acortado, puede que no hayamos pasado suficiente tiempo en determinadas etapas del sueño. En otras palabras, lo bien que hayas descansado y lo bien que funciones al día siguiente dependerá del tiempo total que hayas dormido y cuanto de las diferentes etapas del sueño has tenido.

Necesitamos dormir para pensar claramente, reaccionar rápido y asentar nuestra memoria. De hecho los procesos del cerebro que nos ayudan a aprender y recordar son especialmente activos mientras dormimos.

Escatimar sueño tiene un precio. Restar tan solo una hora de sueño puede hacer que sea difícil concentrarse al día siguiente y enlentecer tu tiempo de respuesta. Los estudios también indican que la falta de sueño hace que tomemos malas decisiones y asumamos riesgos innecesarios. Esto puede dar lugar a bajo rendimiento en el trabajo o la escuela y mayor riesgo de sufrir accidentes de tráfico.

Foto: Juan-García en unsplash.

El sueño también afecta al estado de ánimo. Si no dormimos suficiente estaremos más irritables y eso afectará a nuestro comportamiento y relaciones. La gente con  falta crónica de sueño tiene más probabilidades de tener depresión.

Dormir es importante para una buena salud. Los estudios demuestran que no dormir suficiente o tener una mala calidad de sueño, incrementa el riesgo de hipertensión, enfermedad cardíaca y otras enfermedades.

Además, durante el sueño, nuestro cuerpo produce determinadas hormonas; por ejemplo, dormir profundamente desencadena mayor liberación de hormona de crecimiento. Otros tipos de hormonas se liberan durante el sueño para ayudar a combatir las infecciones. Por eso dormir bien ayuda a evitar enfermedades y mantenerte sano.

También se liberan durante el sueño hormonas que afectan al uso que el cuerpo hace de la energía. Así la gente que duerme menos es más propensa a ser obesa, desarrollar diabetes o preferir alimentos muy calóricos y ricos en carbohidratos.

¿Por qué es necesario dormir bien? Los 6 beneficios del sueño

  • Incrementa la creatividad. Cuando el cerebro está descansado y la producción de hormonas está equilibrada, la memoria funciona a la perfección.
  • Ayuda a perder peso.
  • Te hace estar más sano.
  • Mejora la memoria.
  • Protege el corazón.
  • Reduce la depresión.

¿Cuántas horas debe dormir el ser humano?

horas de sueño

Adultos más jóvenes (18 a 25): entre 7-9 horas al día, y no menos de 6 ni más de 10-11. Adultos (26-64): lo ideal sería dormir entre 7 y 9 horas, aunque no siempre se logra. Adultos mayores (de 65 años): lo saludable es descansar entre 7-8 horas al día.

¿Qué beneficios tiene el dormir correctamente las horas recomendadas?

Dormir bien es fundamental para mejorar la capacidad intelectual. Nuestro cerebro necesita desconectarse varias horas para así procesar toda la información que acumuló durante el día. Una actividad psicomotriz no se puede ejecutar correctamente si nuestro cerebro no está descansado.

¿Qué pasa si duermo 5 horas todos los días?

Lo que sí han demostrado es que la privación de sueño crónica no sólo tiene efectos a nivel cognitivo, en el estado de ánimo y en el riesgo cardiovascular; también influye en la diabetes y la obesidad.

¿Cuántas horas se debe dormir un adulto?

Los médicos recomiendan que los adultos duerman de 7 a 8 horas todas las noches. En el caso de los adultos mayores el sueño es menos profundo y más entrecortado que el sueño en las personas más jóvenes. Una persona de 70 años sana puede despertarse muchas veces durante la noche sin que esto se deba a una enfermedad

¿Qué es el dormir bien?

Dormir bien significa estar en un estado de reposo, en el que se suspende toda actividad consciente y todo movimiento voluntario. Además del descanso físico, el sueño permite el desarrollo del sistema nervioso y la conservación de la energía.

– Mientras duermes, tu cerebro consolida las memorias y se regula tu estado del humor, disminuyendo la agresividad y la ansiedad.
– Una persona debe dormir al menos 7 horas al día, para mantener el funcionamiento óptimo de sus capacidades mentales.

CONSECUENCIAS DE LA FALTA DE SUEÑO

La falta de sueño tiene consecuencias muy evidentes durante el día como la tendencia a dormirse a todas horas, el cambio repentino de humor, la tristeza, la irritabilidad, la actitud pesimista, el aumento del estrés, la ansiedad, el retraso en la respuesta a estímulos, menor capacidad de atención y la sensación de peso sobre el cerebro.

RECOMENDACIONES PARA MEJORAR TUS HÁBITOS AL DORMIR

– Respeta  tus horarios de sueño.
– En las noches consume una cena ligera.
– Haz ejercicio  lejos de la hora de dormir.
– No consumas alcohol, tabaco o cafeína.
– No dejes  tareas y actividades para  último  momento.
– Si detectas que no logras conciliar el sueño o te despiertas  frecuentemente, solicita ayuda médica.
– Duerme en una habitación bien ventilada pero evita el exceso de frío.
– Elimina del ambiente cualquier molestia como ruidos o exceso de luz.
– No lleves los problemas a la cama.
– Mantén horarios regulares de alimento, ejercicio y sueño.
– Evita las siestas o no las alargues por más de media hora.

Foto: david-matos-unsplash

¿El sueño elimina los desechos del cerebro?

En la última década, nuevos descubrimientos han sugerido otro papel importante para el sueño: un tipo de «gestión de residuos». Las neuronas y la glía tienen altas tasas metabólicas y producen una gran cantidad de desechos. Los desechos incluyen sustancias tóxicas que incluyen lactato y 2 moléculas (amiloide-β [Aβ] y tau) fundamentales para la patología de la enfermedad de Alzheimer (EA). Las neuronas y la glía se dañan fácilmente con tales desechos y, por lo tanto, tienen una gran necesidad de eliminarlos de manera eficiente.

¿Son las consecuencias para la salud de la privación del sueño secundarias a la disfunción glifática?

La pérdida crónica de sueño está asociada con una variedad de trastornos neurológicos, que incluyen EA, enfermedad de Parkinson, esclerosis múltiple, accidente cerebrovascular, enfermedad de Huntington, epilepsia, glioma, trastornos del espectro autista y dolor neuropático. La falta de sueño también reduce la función del sistema glifático. ¿Podría esto último explicar lo primero?

La posibilidad es más clara con la enfermedad de Alzheimer (AD). En moscas de la fruta, roedores y seres humanos con función cognitiva normal, la falta de sueño parece aumentar la acumulación de Aβ. Los estudios en animales indican que lo hace al alterar la función de los canales de agua glifáticos. Por ejemplo, los ratones con canales de agua deteriorados (en comparación con los ratones con canales de agua intactos) tienen una función glifática reducida, una acumulación de proteínas Aβ y tau en el cerebro, neuroinflamación, pérdida de sinapsis y disminución de la memoria de trabajo.

Una razón principal para dormir puede ser activar el sistema glifático recién descubierto para eliminar los productos de desecho del cerebro.Se necesitan más estudios en humanos, particularmente en adolescentes y niños en quienes la interrupción del sueño es común. Un enfoque obvio de la investigación debería estar en las terapias que mejoran la función del sistema glifático.

Fuentes:

Intramed (¿Por qué duermen los humanos?)

Anthony L. Komaroff Facultad de Medicina de Harvard, Boston, Massachusetts (Does Sleep Flush Wastes From the Brain?).