Por Florencia Vizzi

«El fenómeno OVNI existe, pero no como lo conciben muchos de los investigadores clásicos del tema. Nosotros creemos que los OVNIS son un fenómeno que no  tiene nada que ver con la vida extraterrestre».  Esta afirmación, que para muchos puede resultar en extremo sorprendente, proviene de dos investigadores rosarinos que integran el Círculo de Investigación del Fenómeno Ovni (CIFO) y que, desde hace más de cuarenta años, se dedican a indagar en este tema.

Néstor Berlanda, psiquiatra e investigador, y Luis Pacheco, historiador, develaron a Conclusión este particular enfoque, que en los últimos años viene revolucionando el área, y que asocia el fenómeno OVNI a la condición humana y  sus tradiciones más ancestrales.

«Es un fenómeno que interactúa con el hombre desde las épocas más antiguas y se manifiesta de diferentes formas» sostienen ambos investigadores. «Nosotros creemos que estamos ante un fenómeno de naturaleza desconocida mucho más complejo de lo que sería una nave de otro planeta que viene a hacer turismo al nuestro. Esa es la base de todo nuestro trabajo de investigación y de ahí partimos también para investigar otro fenómeno fundamental que son los Estados No Ordinarios de Conciencia, que son esos estados que normalmente se conocen como de «trance» y que, para nosotros, están muy relacionados tanto con el fenómeno OVNI como con todo tipo de encuentro con esto que es lo sobrenatural, con esta otra parte de la realidad».

En ese sentido, Berlanda especificó que lo que se investiga no son los OVNIs, sino informes de personas que dicen haber visto o interactuado o haber sido abducidos. «Nos enfrentamos a historias que tienen un alto índice de veracidad y está claro que a la gente que enfrentó este fenómeno, algo le pasó, pero el problema es que no sabemos qué. Y ahí es cuando entran a tallar todas estas hipótesis de los seres extraterrestres que, si uno lo piensa bien, tienen un alto contenido de absurdo».

Por esta razón, los investigadores de CIFO pensaron que había que ir más allá. Y para poder profundizar en el tema había que hacer eje en el testigo y en lo que vivió,  lo que sintió. Berlanda refiere a varios testimonios que acompañó e investigó en profundidad durante años. «Es ahí que nos encontramos con vivencias muy similares, fenómenos lumínicos, visiones y vivencias parecidas. Y esos relatos son similares a otros fenómenos por ejemplo la luz mala en el campo, apariciones de espíritus, la salamanca o a las mismas apariciones marianas, la virgen de Fátima o de Lourdes, todos estos fenómenos relacionados que también son lumínicos… Estos encuentros, que serían los llamados «del tercer tipo» son los que nosotros catalogamos de extraordinarios».

El psiquiatra explica que «hay un fenómeno que, en definitiva, es una parte muy profunda de la conciencia que provoca o interactúa con el testigo y provoca la experiencia. Y no estamos diciendo que esa experiencia sea la imaginación, sino que refiere a una especie de sueño despierto, un estado particular de conciencia, es como atravesar una barrera que te posibilita a ingresar en otra porción de realidad».

Los investigadores afirman que, a medida que se empieza a profundizar en estos encuentros o abducciones, se empieza a notar un patrón que repite en forma cuasi exacta los mismos pasos que realizaban los chamanes de las culturas de los pueblos originarios.

«El chamán entraba en un estado particular de conciencia, y cuando entraba en ese trance, en esa otra realidad, se encontraba con entidades con las que interactuaba,  que les ponían cristales de cuarzo en el cuerpo… y volvían con marcas de ese encuentro. Ese es un fenómeno que sucede desde tiempos inmemoriales, ahora bien, con qué se encuentran y qué atraviesan es el gran enigma, cuál es la naturaleza última de este fenómeno».

Durante la entrevista,  Berlanda y Pacheco trazan líneas que entrecruzan las tradiciones ancestrales con las experiencias sensoriales, los rituales de iniciación chamánicas y el contacto con lo sobrenatural para explicar esas experiencias que tienen que ver con atravesar una porción de la realidad que percibimos para conocer otras porciones que suelen permanecer ocultas e inaccesibles.