MIéRCOLES, 27 DE NOV

Los centros de diálisis necesitan recomponer los costos de los servicios: «Si esto no sucede el paciente muere»

Debido a la intimación recibida por el Pami, el presidente de la Asociación de Prestadores de Diálisis y Transplantes de la Provincia de Santa Fe, habló con Conclusión explicando lo urgente de la resolución de esta problemática y explicó porque tomaron la medida de no recibir pacientes nuevos en los centros de módulos de diálisis.

La Confederación de Asociaciones de Diálisis de la República Argentina (Cadra) anunció que desde este lunes 5 de Agosto, todos los centros privados de diálisis del país se verán imposibilitados de recibir nuevos pacientes derivados por el Pami.

La medida, que se implementa a nivel nacional, surge ante la falta de respuestas positivas de las autoridades de la obra social de los jubilados, a los recurrentes pedidos de los nefrólogos con respecto a la actualización del arancel de los servicios, prácticamente sin aumentos significativos desde hace bastante tiempo.

Cadra envió una carta documento a las autoridades del Pami, expresándoles la gravedad de la crisis que afecta a los centros de diálisis del país, advirtiendo, además, que si no se actualizaba el valor del arancel, en agosto no estarían en condiciones de recibir nuevos pacientes del Pami y, de persistir el conflicto, desde el 5 de Septiembre próximo, se suspendería la atención de los pacientes en tratamiento, quienes seguirán recibiendo el servicio hasta que el Pami indique la derivación.

A raíz de esta situación, el Pami intimó a la Confederación de Asociaciones de Diálisis de la Argentina para que desista de tomar cualquier medida que implique un cambio en las prestaciones de sus servicios, advirtió que será penalmente responsable ante cualquier falta de atención y llamó a una mesa de diálogo para analizar el incremento arancelario reclamado por la entidad.

Conclusión habló con el doctor Marcelo Farías, presidente de la Asociación de Prestadores de Diálisis y Transplantes de la Provincia de Santa Fe, quien al consultarle sobre esta intimación, mencionó que «el problema no es por los pagos ni que estén atrasados, aunque se cobra a 90 días. El principal problema es el valor que están pagando del modulo de diálisis».

«Ellos están pagando un valor de módulo bajísimo que no se actualizó desde 2017. Lo que quieren ellos ahora es que nos reunamos y que hagamos una mesa económica para ver los costos de la diálisis y en 60 días definir este tema. Lo que se le plantea es que después de dos años de estar queriendo que aumente a un valor real, como vamos a esperar 60 o 90 días más, que en un momento electoral quizás nunca más se habla el tema», especificó el doctor responsable de la entidad.

Sobre la problemática que aqueja al sector, Farías expresó: «El problema es el valor del módulo, no que tengan atraso, que si bien están a 90 días los pagos, que tendrían que estar a 60, pero eso se podría aguantar. El problema es el valor insuficiente que se paga el módulo y no ha sido actualizado, porque todos los insumos de diálisis están dolarizados. También están las paritarias, también tenés el transporte de los pacientes».

La necesidad urgente es la solución de los costos del servicio de diálisis. «Se esperó mucho tiempo. Lo ideal es recomponer el valor del módulo ahora, a un precio aceptable para ambas partes y ahí sentarnos en una mesa a charlar», ya que el precio del módulo «es $4.700 y ellos están pagando $3.100 el valor de la sesión. Lo ideal sería que pactemos $4.100 para solucionar y después nos sentamos en una mesa a hablar. Pero tampoco nos escuchan».

Los pacientes de Pami representan un porcentaje importante en la totalidad de los servicios prestados. «El Pami representa el 43% de la población de diálisis de los centros. Si no seguimos con eso, tenemos casi un 50% menos de trabajo. Eso determina menos personal, menos gente que transporta, salida de médicos, porque claramente te tenés que achicar», especificó Farías.

Al respecto de la intimación del Pami hacia la institución que nuclea a los centros de diálisis, el responsable de dicho estamento explicó: «Hace 35 días tuvimos una reunión, porque en esa oportunidad no dejaron que ingresemos porque no nos querían recibir. Entonces decidimos enviar cartas documentos mencionándoles que si no percibimos el aumento en 30 días, el 5 de agosto, esto mediante abogados por supuesto, no iba a haber ingresos nuevos para tratamiento, y de persistir el no aumento el 5 del 9 ya no íbamos a recibir a los pacientes, pero íbamos a derivarlos a donde el Pami nos diga». Y concluyó: «Si esto no sucede el paciente muere».

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