Los sindicatos docentes Amsafe y Sadop de Rosario marcharon este martes, en el marco del paro dispuesto con anterioridad, para exponer su preocupación por la violencia que afrontan las escuelas en particular y la ciudadanía en general.

La importante manifestación que se dirigió desde la Plaza 25 de Mayo hasta las puertas de la delegación de la Gobernación fue más numerosa que las últimas que se vinieron realizando en los últimos tiempos y pudo ser mayor de no haber transcurrido el paro de colectivos.

Durante la misma, el secretario general de Amsafe Rosario, Juan Pablo Casiello valoró la presencia docente y de otros sectores de la sociedad rosarina y subrayó: “Toda la educación hoy en el departamento Rosario es dando esta señal muy fuerte de que así no podemos seguir. Basta de violencia, basta de balaceras, basta que entrar y salir de una escuela sea una situación de riesgo, no podemos seguir así”.

Enseguida, cargó con firmeza en contra del Gobierno provincial: “A Perotti que deje de comentar esta realidad, Perotti parece un comentarista más que un gobernador”.

Me parece que hoy es un paso, después seguramente vamos a dar otros pasos, muy probablemente la semana que viene, que seamos parte de una jornada regional, pero que incluya el conjunto de los gremios, no es un problema solamente de los trabajadores de la educación, es de todos los sectores de trabajadores, así que esperamos la semana que viene dar la mejor señal en ese sentido”, advirtió.

“Encontramos un Gobierno que parecerá que está en otra frecuencia, parecerá que es un Gobierno que cree que pagando mucha publicidad, diciendo que hace obras, le va a ir bien en las elecciones, y va a cerrar un mandato”, dijo más adelante.

Más adelante, insistió en sus pedidos al Gobierno provincial para que “cambie la política”, y consideró que “es necesario que el conjunto de la clase política se haga cargo de estos problemas, que se deje de apostar a usar esto solamente con fines electorales” y añadió que la misma “está fallando, la respuesta no es por ahí, es un problema muy grave y se está llevando la vida de muchos”.

Por su parte, el secretario general de Sadop, Martín Lucero, dijo: “Nosotros creemos que hay una decisión concreta y definitiva de parte de algunos sectores de la criminalidad de utilizar la escuela como caja de resonancia para trasladar sus mensajes del terror al resto de la ciudadanía”

“No estamos hablando de simples actos de criminalidad, sino que estamos hablando de actos que transmiten terror porque se meten con lo más sensible que tiene una sociedad, que son sus hijos y sus hijas, lo más pequeño de cada familia”, señaló.

Tras aclarar que este es un mensaje “para toda la clase política de la provincia de Santa Fe”, expuso que “el Estado es el que tiene que dar respuesta a estas situaciones” debido a que “el plan de patrullaje en la entrada y salida de los chicos evidentemente hoy no alcanza, no ha funcionado”.

“Lo que hay concretamente la semana que viene es una convocatoria para un paro regional que va a abarcar no solamente a la docencia, sino que va a abarcar a todos los gremios, tanto de Rosario como seguramente del Cordón Industrial”, culminó.

Asimismo, el padre de Carlos “Bocacha” Orellano, Edgardo Orellano, advirtió que “quedan 6 meses de este mandato y los políticos deberían tener un poquito de dignidad y hacer algo. Desde el gobernador, pasando por diputados y senadores para sancionar lo que haya que sancionar, reformar lo que haya que reformar y mañana mismo intervenir la Policía y la Justicia”.

Además, subrayó: “Muchos empresarios son responsables de lo que nos está pasando, por ejemplo, Vicentin a quien no quiero al lado mío, por ejemplo, a las multinacionales no las quiero al lado mío, son los dueños del mal”.

“Ahora directamente balean a la escuela. Y no solamente a la escuela, ya balean a la salida de la escuela cuando están todos los chicos en la calle. Cuando se meten con las criaturas ya está, ya no hay vuelta atrás. Acá el pueblo se reveló, se está revelando y empezamos una nueva lucha”.

Además, Orellano expuso: “Lo único que hacen es mantener a una policía corrupta que reparte la droga con los patrulleros policiales, que le vende las armas y las municiones a los delincuentes. Y cuando caen algunos presos, los jueces los largan en seguida para que vuelvan a la calle a seguir con el negocio”.

“Acá están gobernando para los grandes negociantes, para los grandes comerciantes de la droga, trata de personas, casinos clandestinos… y a los que vengan nuevos que se pongan las pilas desde el primer día, esto se desmadró, tocó fondo”, concluyó.