El Centro de la Industria Lechera (CIL) advirtió hoy que el conflicto generado en la planta de General Rodríguez de la empresa Mastellone Hnos. -elaboradora de los productos La Serenísima-, que afecta tanto a la producción como al abastecimiento de productos lácteos, podría extenderse a todo el sector.

Así lo manifestó la entidad que nuclea a las principales empresas lácteas de la Argentina en un comunicado de prensa.

«Todas las empresas socias y la propia Cámara manifiestan su preocupación ante estos hechos y las consecuencias que estos podrían tener de no encontrarse una urgente solución», señala el CIL.
La entidad agregó que «además expresan su solidaridad con la compañía, poniendo a disposición la capacidad de recibir su materia prima, dentro de sus posibilidades».

«No queremos dejar de señalar la importancia de este conflicto, ya que de nacionalizarse una actitud de este tipo, de lo cual ya trascienden comentarios, estaríamos ante un escenario de extrema gravedad que afectaría no solo el abastecimiento de productos lácteos en todo el país, sino también al sector primario, el que ya se encuentra inmerso en una muy difícil situación», concluyó.

Comunicado de la empresa

La empresa Mastellone Hermanos comunicó a la Comisión Nacional de Valores (CNV), a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires y al Mercado Abierto Electrónico (MAE), los alcances de la medida de acción gremial que desde ayer afecta a su plante industrial de la localidad bonaerense de General Rodríguez, y alertó que de continuar «afectará seriamente» su actividad y «pone en riesgo» el desenvolvimiento de la compañía.

En una carta, que lleva la firma del responsable de Relaciones con el Mercado de Mastellone, Claudio Fernández Saavedra, se informó que «súbitamente y de manera sorpresiva, la seccional General Rodríguez del gremio Atilra (Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera) ha decidido llevar a cabo una nueva medida de fuerza, la cual tiene mayor alcance que las anteriores».

Como Mastellone es una compañía con oferta pública y cotización en la Bolsa porteña, tiene como obligación comunicar al mercado y sus accionistas cualquier situación que pueda afectar su actividad.

En la comunicación, Fernández Saavedra puntualizó que «esta medida gremial, de continuarse, afectará seriamente a la recolección de leche de los tambos, la industrialización y distribución de nuestros productos y, por lo tanto, pondrá en riesgo no sólo el normal desenvolvimiento de la compañía, sino fundamentalmente a todo nuestro personal, productores, proveedores y consumidores».

Indicó que «esta sorpresiva medida, carente de toda proporcionalidad y racionalidad, se toma luego de finalizar los períodos de conciliación obligatoria y voluntaria, dictada por el Ministerio de Trabajo de la Nación y en momentos en que ambas partes estaban manteniendo canales de diálogo cerca de alcanzar un acuerdo satisfactorio».

En consecuencia, subrayó que «subyacen otros objetivos que los declamados y están vinculados con los hechos de violencia registrados en la compañía el pasado 26 de febrero de este año», sobre el cual precisó que finalizó «el debido proceso interno para esclarecer lo ocurrido y, en base a lo cual hemos tomado las debidas medidas disciplinarias».