Durante el encuentro fueron abordados tres puntos de importancia para el sector: regulación de la expansión de las cadenas de kioscos; alta de locales como puntos de recarga de tarjeta Movi; y aval a la presentación de denuncias por hechos de inseguridad en los comercios a través de una web institucional o una aplicación de la Cámara.
La medida en discusión apunta a eliminar la publicidad directa e indirecta de productos vinculados al tabaco.
La iniciativa busca poner reglas que limiten la expansión de estas cadenas y su consecuente acaparamiento del mercado, una situación que pone en peligro el abastecimiento de los pequeños comercios.
En kioscos y almacenes se percibe mes a mes la desvalorización de los ingresos, ya que se siguen advirtiendo suba de precios en varios artículos que forman parte de la canasta básica. Referentes de esos sectores reclaman por la faltante de productos pertenecientes al consumo masivo. Un tema de urgente solución, al cual parece no querer atenderse seriamente.
Los locales más golpeados son los ubicados en el centro de la ciudad y los que se encuentran en cercanías de establecimientos educativos, donde las ventas cayeron más del 80% cuando no hubo clases presenciales.
Igualmente, en el sector resaltan la necesidad de extender su horario de funcionamiento para dejar de competir directamente con las grandes cadenas de supermercados.
La Cámara de Kiosqueros de Rosario solicitó al municipio que los comercios que se encuentren cerca de escuelas puedan abrir a las 7 y que el resto funcione hasta las 23, para evitar que el horario de cierre coincida con el de los grandes supermercados.
Desde el sector advierten que no tienen margen para absorber el incremento y lo trasladarán directamente al consumidor.
Desde la Unión de Kioqueros de la República Argentina se denunció el cobro del costo de distribución de un 3%, el cual consideran como una "viveza criolla" de parte de la multinacional. El ministerio de Comercio Interior ya tomó sus denuncias y está a la espera de una respuesta por parte de la firma.
“Lamentablemente, en las últimas semanas varias de las firmas han tenido faltantes y no hemos podido abastecernos de mercadería con un precio considerable para hacer promociones a nuestros clientes”, indicaron desde la Cámara de Kiosqueros de Rosario.
Laura, dueña del kiosco de Francia y San Juan habló con Conclusión y dijo que los distribuidores oficiales aseguran que “no hay producción y se terminó el stock del depósito en Rosario, por lo pronto no nos reponen mercadería”.
La firma emitió en las últimas horas 50 telegramas de despido, que recayeron sobre los trabajadores con menor antigüedad. En tanto, se prevé que el número de cesantías llegue a 200.