Un informe de la consultora Scentia estimó que en los primeros dieciocho días de agosto las ventas en supermercados cayeron un 22,6% interanual. La situación se siente de lleno en Rosario, donde además advirtieron que los consumidores cada vez usan más tarjetas de crédito para aprovechar los descuentos que ofrecen los bancos.
El titular de la Cámara de Supermercados de la ciudad, Sergio López, advirtió que muchas personas dejaron de comprar productos que integran la canasta básica a causa del deterioro que han tenido sus ingresos en los últimos nueve meses. Además, indicó que ante la caída de consumo algunas empresas bajaron sus precios.
Desde la Cámara de Supermercados y Autoservicios de Rosario alertaron que los proveedores envían nuevas listas de precios cada siete o quince días. Los aumentos semanales provocaron notorios cambios en los hábitos de compra de los consumidores, que renuncian productos como quesos, fiambres, gaseosas o enlatados, y se vuelcan a las segundas y terceras marcas.
