Por Juan Manuel Martellotto

Seguramente en mas de una oportunidad, y hace un par de años, era muy probable verlo, portador de un gran carisma y de una llamativa presencia, con su guitarra y agradable voz, tocando y cantando al aire libre, en algunos de los tantos y encantadores lugares que tiene  Rosario, como por ejemplo la costanera centro, al lado del río.

Max Bahía es un artista brasileño que vive en Argentina, hace ya un lustro. Si bien en principio llegó a la cuna de la bandera luego de una singular historia romántica, actualmente reside en la ciudad más austral del mundo, Ushuaia, donde trabaja no sólo con la música sino con otras actividades relacionadas con las realizaciones audiovisuales.

“Estaba en 2018 en San Paulo haciendo temporada de verano, cantando en bares restaurantes y ¿qué pasó? Conocí una rosarina y nos enamoramos en tres días. Y luego me vine a vivir acá esta ciudad hermosa”, cuenta sonriente el músico bahiense y agrega: “llegué a Rosario un 6 de marzo de 2018. Teníamos un plan de irnos de acá. Fue un problema para nuestra relación porque yo me quería quedar acá y le imploraba a mi pareja que por favor nos quedemos un poco más pero ella ya no aguantaba vivir acá…”

-Rosario te adoptó y vos la sentís parte tuya porque veo que volvés siempre que podés…

-Sí y ya sentí esta energía. Mirá que yo en Salvador hablaba con mi madre toda mi adolescencia y siempre busqué vivir afuera de Salvador porque es una ciudad de mucha fiesta. Me gusta pero es totalmente eso ¿me entendés? Y a mí me gusta tener la elección de fiesta o tranquilidad. Y entonces siempre busqué yo y mis hermanos también, somos seis y mirá que viajamos mucho todos para vivir afuera y yo siempre tuve esta necesidad de salir y acá en Rosario encontré mi ciudad. Me siento más en casa acá que en mi ciudad. No confundo eso con que me gusta un lugar más que otro. Digo que acá me siento como en mi casa, tanto que ahora que me tomé vacaciones desde Ushuaia, el dinero que se gasta acá, es el mismo que podría ir a Salvador porque un viaje y un mes no es fácil pero prefiero estar acá porque necesito estar en Rosario, como en mi casa.

-Cuando llegaste a Rosario, la ciudad te abrió las puertas hasta en el ámbito laboral. Tenías  un programa en una radio conocida, entre otras actividades…

-Claro, empecé con muchas cosas nuevas. Un país que yo siento que desarrollé mucho mis habilidades para vivir afuera. Creo que después de todo lo que yo viví acá en Rosario, yo podría ir a China con dólares y me iría bien porque acá aprendí mucho de la calle, de tocar en la peatonal, hablar con los bares, qué cosa lograr o no en una noche de música. Todo eso me dió Rosario. Obviamente que estoy hablando de Rosario como ciudad de un país en el extranjero. Imagínate lo primero que escuché acá cuando llegué fue que no se puede vivir de la música y yo viví de la música 4 años y medio… Obviamente con condimentos laborales dentro de la música.

-Hablando de música, ¿Cómo se inició tu pasión por este arte en particular?

-Adolescencia, tocando el teclado con una banda de samba. Nada que ver. Yo vivía en Salvador estudiando y allí como en muchas ciudades de Brasil, vos crecés escuchando música “en vivo” todo el tiempo. Por eso vos mencionabas un tema de algunos espacios que fueron quitados de lugar y para mí culturalmente no puedo creer porque… la música allá… Hay que estar, en ambientes, restaurantes, bares, hay que estar…

Viene un adolescente escuchando tanta música en todos lados, en cada esquina, es difícil que uno no sepa tocar algo. Aunque sea un tema, dos, hay que tocar algo, una percusión y eso me influenció y como yo tenía un poco de facilidad con el teclado.

Hoy estaba tomando una ducha y me acordaba de una persona que me dió la oportunidad en un momento en que yo no sabía nada. Yo tenía mucha coordinación motora pero no sabía tocar mucha cosa. Me gustaba el teclado

-Hay muchos músicos que en realidad no saben música y lo hacen de oído. ¿Sería tu caso?

-Es mi caso, yo no sé nada de teoría, no sé por qué un acorde es con séptima menor. No me pregunten esas cosas pero tengo mi manera de tocar, mi característica y que me ayudó mucho.

NOTA COMPLETA EN EL VIDEO