La película compitió con la chilena “1976”, de Manuela Martelli; la colombiana “La jauría”, de Andrés Ramírez Pulido; la mexicana “Noche de fuego”, de Tatiana Huezo; y la boliviana “Utama”, de Alejandro Loayza Grisi.

Argentina, 1985” tiene a la historia como cimiento y el thriller político como forma de contar cinematográficamente un acontecimiento decisivo como fue el Juicio a las Juntas por las violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura, que llevó a adelante el equipo de fiscales encabezados por Julio César Strassera (Darín) y Luis María Moreno Ocampo (Lanzani).

Los rivales

1976” también está relacionada con los Derechos Humanos, en este caso durante la dictadura encabezada por Augusto Pinochet en Chile, en la que una ama de casa burguesa (Aline Küppenheim) auxilia a un joven herido en un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad.

En el caso de “La jauría” es la opera prima de Ramírez Pulido sobre un grupo de jóvenes delincuentes recluidos en un centro de terapia experimental en medio de la selva donde la meditación se mezcla con los trabajos forzados.

El primer largo de ficción de Tatiana Huezo, “Noche de fuego”, basada en el libro “Prayers of the stolen de Jennifer Clement, es un relato sobre tres niñas que viven en las montañas del estado de Guerrero en México y aprenden a sobrevivir en un pequeño universo dominado por el narcotráfico.

Entre las películas que competirán por el Premio Goya a la Mejor Película Iberoamericana, está la boliviana “Utama”, de Alejandro Loayza, centrada en la historia de una pareja de ancianos indígenas que se enfrentan a una feroz sequía que amenaza su existencia.