En una decisión del viernes por la noche, los jurados otorgaron a James Draeger, Valorie Gunther y Dan Anderson 61,1 millones de dólares en daños reales y la asombrosa cantidad de 500 millones de dólares cada uno en daños punitivos. Afirmaron que años de uso de Roundup en sus propiedades les provocaron linfomas no Hodgkin. Este veredicto es uno de los más cuantiosos contra una empresa estadounidense demandada este año, eclipsando incluso un importante veredicto de 1.780 millones de dólares en un caso federal de bienes raíces (que podría dispararse a más de 5.000 millones de dólares), informa Bloomberg.
Los funcionarios de Bayer dijeron el sábado que los jueces estadounidenses han permitido lo que consideran una caracterización errónea de las decisiones regulatorias sobre la seguridad de Roundup. A pesar de las recientes victorias de los demandantes, la compañía dice que sigue confiando en revocar estos veredictos, citando el apoyo regulatorio continuo para el glifosato, el ingrediente principal de Roundup. Bayer planea eliminar gradualmente el glifosato en el mercado de consumo estadounidense para finales de año.
La indemnización punitiva en el caso de Missouri puede estar sujeta a reducción, ya que los fallos de la Corte Suprema de Estados Unidos generalmente limitan dichas indemnizaciones a diez veces los daños reales. Sin embargo, Monsanto ha recibido anteriormente indemnizaciones por daños sustanciales en casos similares, incluido un veredicto de 2.000 millones de dólares en California, que luego se redujo a 87 millones de dólares.
Los demandantes en la mayoría de los casos Roundup argumentan que Monsanto era consciente de las posibles propiedades cancerígenas del glifosato e intentó suprimir esta información. Documentos internos han revelado esfuerzos de los funcionarios de Monsanto para influir en los estudios científicos que respaldan la seguridad del glifosato.
