Con el diario de la previa, un empate como visitante frente a uno de los equipos más firmes del campeonato nunca es mal negocio. Si se ve el desarrollo del partido, también sigue siendo sumamente rescatable que Rosario Central se haya quedado con un punto de su visita a Tucumán.

Sin embargo, a pesar de todas sus complicaciones, algunos jugadores del ‘Canalla’ parecieron haber hecho en el segundo tiempo todo lo posible para que Atlético les dé vuelta el resultado, siendo el joven Facundo Buonanotte y el arquero Gaspar Servio quienes terminaron salvando la ropa.

Siendo el ‘Decano’ quien tuvo la pelota y la iniciativa a lo largo del encuentro, Central comenzó jugando un partido inteligente, siendo cauteloso y sin regalarle nada a uno de los equipos más goleadores del torneo.

Ante la ineficacia del local para transformar su tenencia en oportunidades claras, el equipo de Carlos Tevez comenzó a probar de a poco con débiles intentos lejanos, hasta que a los 24 minutos del primer tiempo Buonanotte sacaría el cartel de ‘joya’ para marcar un verdadero golazo de larga distancia.

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El enganche, una de las grandes promesas de la cantera auriazul, fue el más determinante en la ofensiva de Central, aunque también bien se podría decir que fue el único. En un partido cerrado, fue con sus arrebatos que el ‘Canalla’ tuvo oportunidades en área rival, tanto en la primera como en la segunda parte.

Sabiendo que el local arremetería con más fuerza, Tevez intentó no alterar demasiado el esquema inicial, dando en el entretiempo salida a un hombre de área como Franco Frías para que ingrese Alan Marinelli. El correr de los minutos también generaría desesperación en el local, que empezaría a sentir la presión de que la pelea por el campeonato se le escapaba de las manos.

Así las cosas, al comienzo del complemento el plan de juego pareció continuar de forma similar para ambos cuadros, con el local contando con más llegadas pero sin poder traducirlas en remates claros al arco.

Sin embargo, las siguientes modificaciones que haría Tevez terminarían, insólitamente, jugándole muy en contra a Rosario Central.

Es que a los 58 minutos de partido marcó el ingreso de Marcelo Benítez y Jonathan Candia, que terminarían influenciando de forma muy negativa en el partido.

Por un lado, el ‘Chelo’ se las arregló para conseguir dos tarjetas amarillas (claras) en 6 minutos, siendo expulsado y dejando la cancha después de tan solo 19 minutos en el campo de juego.

Sobre el final, con Central pasándola mal y metido mucho más atrás por el hombre de menos, Candia terminaría cometiendo un insólito penal al darle un puñetazo a la pelota en su propia área, cuando ya se habían cumplido los 45 minutos.

Sin embargo, Gaspar Servio sacaría su chapa de atajador de penales y terminaría convirtiéndose en el héroe de la noche para Central, atajándole el remate a Ramiro Carrera y quedándose con la ilusión tucumana en sus guantes.

Poco tiempo neto de juego quedaría luego de esa acción, con lo cual el ‘Canalla’ terminó consiguiendo un valioso punto en Tucumán, sirviéndole en bandeja a Boca Juniors la oportunidad de consagrarse campeón de la Liga Profesional.

Las conclusiones para el equipo auriazul son las mismas de hace rato: hace falta un cambio profundo de plantel y hay jugadores que no se merecen vestir más la camiseta, al no entender la responsabilidad de lo que se están jugando.