La falta de luz en el Abierto de tenis de Francia obligó a interrumpir el duelo entre Jo-Wilfried Tsonga y Renzo Olivo cuando el rosarino estaba al borde de la mejor victoria de su historia, con parciales de 7-5, 6-4, 6-7 (6-8) y 5-4 a favor en el marcador. El segundo Grand Slam de la temporada es el único que no tiene luz artificial y al caer el sol los partidos quedan en suspenso hasta el día siguiente.

Olivo, número 91 del ranking con 25 años, sirvió con 5-3 a favor para cerrar el partido. Pero dos errores no forzados en los dos primeros puntos lo privaron de la heroíca y después entregó su saque.

Mañana tendrá la oportunidad de abrochar el triunfo cuando se reanude el partido, en el segundo turno de la misma cancha central. Servirá Tsonga para intentar poner el 5-5 en el cuarto set.

El francés, semifinalista en la arcilla de París en 2013 y 2015, es actualmente el número 11 del ranking mundial y llega otro año más como la gran esperanza de Francia para el torneo.