Central masticó bronca tras el empate agónico de River, en un partido que parecía ganado, otra vez como en el choque contra Boca le quitaron la victoria en el final. Igualmente, el Canalla redondea un gran rendimiento en casa, en la Liga es el único equipo sin derrotas de local, todo un logro del DT Russo.

En un partido vibrante y emocionante hasta el final, el empate 3-3 parece ser lo más justo por el trámite del juego. Central tuvo un alto poder de fuego y River exhibió un mejor juego, en varios pasajes del match.

El equipo de Miguel estuvo a la altura de las circunstancias, porque el tridente Malcorra-Campaz-Véliz volvieron a tener buena productividad, el joven goleador anotó un doblete y tuvo más posibilidades (un cabezazo dio en el travesaño) para ampliar su cuenta ante el Millo (le hizo cuatro goles en dos partidos).

Pero la visita, en contrapartida, hizo que el arquero Jorge Broun sea figura, porque tapó varias bochas de gol, una muy clara ante Rondón. Eso quiere decir, que el partido fue de ida y vuelta, sin contención en la zona media y el Canalla tuvo un rendimiento irregular, y pecó de inocente por cómo le arrebataron la victoria, cuando los tres puntos parecían seguros en el bolsillo.

Queda claro que Central tiene algunas individualidades que salva el irregular nivel colectivo. Viene creciendo Broun en sus rendimientos; la dupla Mallo y Quintana, generan seguridad; y el tridente Campaz-Malcorra-Véliz, es la mejor apuesta ofensiva desde la época del conjunto de Coudet hasta aquí en el tiempo.

El elenco rosarino completa el fixture de local sin derrotas, fueron 14 partidos, con 9 victorias y 5 empates, una campaña para pelear el título, si se balancea con los resultados de visitante, donde no hay dudas que el Canalla decepcionó y mucho, consiguió una sola victoria hasta el momento.

En definitiva, es un buen semestre para Central, la llegada de Russo generó un cambios en el equipo, hizo un retoque, acertó con las incorporaciones, que se transformaron en refuerzos con el correr de los partidos.