La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, descartó hoy la posibilidad de negociar la entrega del prófugo Ibar Pérez Corradi y consideró como «un gran aprendizaje» el proceso de recaptura de los evadidos del penal de General Alvear.
«No negocio con ellos. Las cosas son claras. Si quiere, que se entregue y si no nosotros lo seguiremos buscando todos los días, como a los otros prófugos», afirmó Bullrich.
En declaraciones a un matutino porteño, la funcionaria advirtió que «lo que piden los abogados de Pérez Corradi es una obviedad: pedir garantías constitucionales que ya están garantizadas».
«Las garantías no las da el gobierno sino la justicia, el gobierno solo debe recapturar a los prófugos», añadió.
Ibar Pérez Corradi es un financista acusado de ser el autor intelectual del triple crimen de General Rodriguez y de mantener negocios ilegales con los evadidos del penal de General Alvear, recapturados el último fin de semana.
Respecto proceso de captura de los hermanos Lanatta y Victor Schillaci la ministra lo consideró que como un «gran e importante aprendizaje» debido a los obstáculos que debieron sortearse en esa tarea.
«Pensábamos que todo el sistema trabajaba ordenadamente y jugaba en el mismo equipo. Pero de pronto nos encontramos con pistas falsas, maniobras y redes de complicidades que ahora debemos desarmar», señaló.
«Podría hablar de autocrítica, pero me lo planteo como un gran aprendizaje. Sabía que estas complicidades existían y esta vez la viví como una experiencia concreta», agregó.
Con relación a la polémica generada por la emisión de información falsa sobre capturas no realizadas señaló que se lleva adelante un sumario y una «investigación muy exhaustiva» para determinar responsabilidades en las irregularidades.
«Le pido a todos los que trabajamos juntos que esperen el resultado de ese sumario. No sirve tirarnos culpas unos a otros. Sea quien fuere el responsable, va a tener consecuencias«, explicó.
«Tenemos que trabajar juntos y ver dónde estuvo ese error de información y si ese error de información no fue para ganar tiempo», en beneficio de los delincuentes que estaban siendo buscados por las fuerzas de seguridad.