El Administrador de Consorcios no funca, pero la doble L tal vez sí

Por Marcelo Trovato en pronosticobursatil.com

Asume un nuevo Administrador de Consorcios a hacerse cargo de un gran Condominio, seduce a los propietarios con que hará grandes cambios, reformas, bajar los gastos extraordinarios, transformar al Condominio en algo nuevo, un cambio de fondo. Pero les dice que para llevarlo adelante necesita tomar deuda de inversores para el inicio de la gran gesta transformadora.

Los propietarios entusiasmados le brindan el aval, más de la mitad de los dueños casi que le firman un cheque en blanco, la otra parte dudó pero decidió esperar a los resultados.

Con ese aval, el Administrador sale en búsqueda de inversores, lo logra con éxito, supera incluso sus propias expectativas, todo marchaba muy bien.

Pero el tiempo pasaba, los resultados no aparecían, las reformas no llegaban, el cambio decepcionaba a los propietarios pero mucho más a los inversores. Estos últimos le dicen al Administrador, la verdad que los resultados no fueron alcanzados, «quisiéramos que nos devuelva la inversión»

El Administrador desesperado por el mal humor de los propietarios y apremiado por el dinero que tenía que devolver a los inversores pero ya se lo había gastado, decide recurrir al prestamista de última instancia, pero para qué ?

El monto que le prestaría iba ser grande, pero no sería suficiente para intentar cumplir el compromiso con los propietarios, sin embargo le sería sumamente útil para devolverle al dinero a los inversores. Total, los Administradores de Consorcio son casi todos iguales, si pueden hacen algo lo hacen, pero en el fondo lo que buscan es ganar un mango.

El Administrador ya perdió la confianza de los propietarios, el condominio está peor que cuando inició su gestión, pero Él debe seguir viviendo, ya sea en la misma ciudad donde se ubica el inmueble o en otro país, pero no puede perder su perfil de empresario y buen pagador, su carrera se vería sumamente afectada para el futuro, y su apellido más manchado aún.

Ahora bien.

El dólar no para de subir, cada vez que se agacha es para tomar envión.
La Tasa de Interés de las Leliqs ya superan el 74% Anual y efectiva supera el 105%
Los intereses por la bomba Leliqs ya superan los $ 2.000 millones DIARIOS. Todos los días Dos mil millones de pesos que habrá que pagar de intereses sumado al capital de casi UN BILLÓN DE PESOS.
El déficit fiscal y el quasi fiscal crecen de manera exponencial.
Modificamos en noventa días, seis veces los términos del acuerdo con el FMI, y en la última mandamos al demonio las metas fiscales.

El riesgo país ya está en los 1000 Puntos
La fuga de capitales no cesa.
La recaudación no logra empatar la recaudación.
Como sostuvimos, la liquidación de la cosecha es mínima y para peor el valor de los granos no paran de caer.
Las monedas en el mundo se están depreciando frente al dólar.

Entonces, de verdad pensamos que todo esto se está haciendo para intentar contener al dólar y llegar a Octubre con chances….?

La respuesta está a la vista, ya no interesan las elecciones, ya no interesa el bronce, sólo honrar las deudas solamente con algunos de los inversores con los que, una vez dedicado a la función privada pueda mantener su apellido limpio y el potencial de negocios futuros.

El Presidente, a diferencia de los últimos doce presidentes constitucionales se encargó hace tiempo de informar a la población que cuenta con una plantel de nueve médicos. El que más tuvo fue Perón, avanzado en edad en su segunda presidencia y eran tres. La salida «Cuestiones de Salud» está preparada por si hace falta.

Lo que está haciendo este Gobierno no funciona, el BCRA está perdido pero Lagarde apoya, mientras Trump empuja. El segundo del FMI, Lipton está que trina, pero Trump empuja. El FMI no le prestó a la Argentina, le prestó a Macri, pero la debemos todos y todos viajamos en el mismo avión, donde parece haber solamente unos cuantos paracaídas con nombre asignado de antemano, Macri, Peña, Durán Barba, Dujovne; Stanley y no muchos más, el resto son sólo fusibles que se pueden quemar, no les importa a la mesa chica.

Las diez razones que enumeramos en párrafos anteriores no aseguran un aterrizaje forzoso sino una colisión sin precedentes históricos.

Y aquí la parte donde los invito a reflexionar: se necesita un hombre con un equipo económico con un Ministro fuerte a cargo (todos saben lo que hay que hacer) pero la necesidad es encontrar una persona dispuesta a pagar los costos políticos y que sume la mayor cantidad de apoyo multipartidario. Que no tenga chance ni deseo de ser reelegido, que gobierne cuatro años, haga lo que tenga que hacer y se vaya a su casa con la satisfacción del deber cumplido.

Ese hombre debe reunir algunos requisitos, experiencias buenas y malas en la gestión de la cosa pública, edad avanzada para que el aplomo le permita no sucumbir ante aprietes ni corrupción, que esa misma edad le impida ir por otros cuatro años y rodearse de jóvenes con experiencia y sin prontuario.

Hoy, mal que nos pese a muchos la futura fórmula Lavagna – Losteau tienen algunas de esas cualidades.

Dicho sea de paso, se haberse aprobado la famosa Ley 125 de Losteau el sector agrícola estaría mejor, la Soja contra esa fecha ya cayó un 30%.

La Provincia de Buenos Aires y la Ciudad están medianamente bien administradas por Vidal y Larreta, siempre son discutibles, pero están para pelear sin problemas la reelección y hasta ganarlas.

Lo que a esta altura ya es una obviedad es que el actual Presidente tiene el «boleto picado», lo sabe, los mercados se ocupan todos los días de recordárselo y tanto el ciudadano de a pie como el sector productivo lo padecen.

Qué parte no entiende este Gobierno que lo que intentan hacer no funciona y que empeora cada día insistiendo con cometer el mismo error, no amagan siquiera a evitar llegar al Triple Tres, y la razón ya es evidente, el Administrador de Consorcio a algunos inversores les tiene que cumplir, a los propietarios les dirá una de dos cosas: 1) salió mal o 2) me siento mal de salud.

Pero por favor, no nos mientan más !!!

Feliz Cumple Viejito. Q.E.P.D.