“Tengo sensaciones muy fuertes por asumir en el club de mis amores”, expresó Eduardo Bermúdez, flamante presidente leproso, sentado desde su nueva oficina con vista al Parque Independencia.
En mano a mano con Conclusión, el primer mandatario de la entidad rojinegra agregó: “Yo pasé por muchos lugares y hoy llego a ser presidente electo democráticamente, luego de unos comicios sanos y limpios, que es lo más importante”.
Al ser consultado sobre si sabía con qué club se encontraba, Bermúdez respondió: “Desde lo económico, este Newell’s no se encuentra en buen estado. La parte futbolística es la que más preocupa; ya que en lo social, por ejemplo, Bella Vista está muy bien y Malvinas lo mismo. Trataremos de luchar para sacar la situación adelante lo más rápido posible”, dijo.
Ya con las cartas repartidas y sobre la mesa, se le pregunta al presidente leproso cuáles son las metas trazadas a corto plazo, y consideró, casi sin dejarnos terminar la pregunta: “Sacarlo a Newell’s de la crisis, llevarlo a un promedio de 1.4 y hacer un plantel largo, donde cada jugador tenga un suplente de jerarquía para que se esmere el que es titular y para que no tengamos el problema de irnos de un gran jugador a un pibe de la quinta división”.
“Ya me estoy yendo a Bella Vista a reunirme a primera hora de la tarde con Diego Osella. Pero calma -sosegó-, no me pidan que arregle en una semana el quilombo que tuvimos en cuatro años”.
A la hora de manifestar sus emociones, Bermúdez enunció que “al socio le agradezco que haya participado de este acto democrático, tanto a los que me reconocieron como a los que no me votaron. Acá, somos todos ñubelistas y tiramos para el mismo lado. Le pediré a las agrupaciones que vengan a colaborar, para trabajar todos juntos y sin agresiones”.
— Ganaste con un caudal de votos (2.803) relativamente bajo, que no representa al enorme mundo Newell’s. ¿Cómo tenés pensado ganarte la confianza de aquellos que no te votaron?
— No coincido, ganamos con diferencia de 360, que son muchos votos. Hay muchos que no lo hicieron pero tenían las intenciones de elegirnos, solamente que había listas importantes como las de Facciano, que es de la misma línea nuestra. Pero vamos a gobernar para todos, ya que somos ñubelistas y, en definitiva, todos sufrimos de la misma manera con este presente. De acá, se sale todos unidos y tirando para el mismo lado.
— ¿Habrá buena relación y diálogo con los otros candidatos?
— Sin ninguna duda. Ya estuve reunido y hablé con todos ellos. Yo lo que digo es lo siguiente: conversar es normal, tomar un café, también… Ahora, si empiezan a los gritos, los agarro del pelito y los saco para afuera [bromea].
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