La gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, anunció hoy «una profunda reforma» al Servicio Penitenciario Bonaerense y destacó que «no es una purga, porque las purgas no resuelven el problema» y destacó el envío a la Legislatura de una modificación del Estatuto que rige al personal de esa fuerza, ya que el actual es una norma de la dictadura vigente desde 1980.

Los cambios en esa fuerza, anunciados por la mandataria, incluyen el pase a disponibilidad de 132 altos jefes del Servicio Penitenciario Bonaerense y la remoción del jefe de ese organismo, Fernando Díaz, quien será reemplazado por el civil Juan José Baric, que ocupará el cargo de forma interina por 90 días.

También se pondrá a prueba por tres meses todos los agentes a cargo de alcaidías, unidades y complejos penitenciarios y se crearán dos organismos de control, uno sobre el desempeño del personal y otro que auditará la gestión en su totalidad.

Vidal, en el transcurso de una conferencia de prensa que brindó en la casa de gobierno provincial, en La Plata, acompañada por el ministro de Justicia, Gustavo Ferrari, destacó que en los cambios introducidos «siempre está acompañada» por el presidente Mauricio Macri.

“Nosotros no vamos a convivir con el delito, esto no es una purga, no creemos en las purgas, porque no resuelven los problemas”, expresó Vidal en el marco de una conferencia de prensa que brindó en la Casa de Gobierno provincial para referirse a los cambios.

Vidal afirmó que “en estos cambios siempre estamos acompañados por el presidente” Macri y destacó que todo se hace en función de “darle más seguridad a los vecinos”.

«La inseguridad no se resuelve con parches ni improvisaciones sino con un plan como éste, de reforma del Sistema Penitenciario de la Provincia al que, a lo largo de tantos años de democracia, nadie quiso cambiar», destacó y remarcó que hasta el momento los penitenciarios «se autogobernaban».

“Sabemos lo difícil de las decisiones que tomamos, pero lo hacemos convencidos”, remarcó la gobernadora y agregó que “en 10 años no hubo un solo informe positivo de los organismos de Derechos Humanos sobre el Servicio Penitenciario Bonaerense».

«Trabajar por la seguridad de los vecinos, pelear contra mafias, el narcotráfico y el juego clandestino es pelear también contra la corrupción y el mal funcionamiento de estas fuerzas de seguridad», aseveró Vidal.

Ayer, el ministro de Justicia decidió descabezar a la cúpula del Servicio Penitenciario Bonaerense, unos 132 oficiales, y en ese sentido la mandataria advirtió que «esta reforma es mucho más profunda. Las purgas no resuelven los problemas, es dar la pelea de fondo en contra de cómo funcionan las instituciones».