El secretario gremial del Sindicato de Petroleros Jerárquicos de Tierra del Fuego, Moisés Solorza, ratificó hoy que el miércoles los operarios cerrarán la llave del Gasoducto San Martín que abastece a gran parte de la Argentina desde la isla.

La medida de fuerza será llevada a cabo en protesta contra la suba de tarifas de hasta el 400 por ciento para los hogares y de hasta el 2.500 por ciento para los comercios e industrias de la Patagonia, lo cual amenaza cientos de puestos de empleo, precisó Solorza.

El sindicato invitó al gobernador del Chubut, Mario Das Neves, y al intendente de Bariloche, Gustavo Gennuso, a participar de la manifestación que se realizará el miércoles en Ushuaia y a la que ya confirmaron su asistencia otros jefes comunales de la Patagonia.

Das Neves y Gennuso libraron una batalla abierta contra el gobierno en los tribunales al presentar recursos de amparo que terminaron por frenar la aplicación del «tarifazo» de hasta el 2.500 por ciento para todos los consumidores por igual.

Mientras rija la medida de fuerza, el miércoles los ministros del Interior, Rogelio Frigerio, y de Energía, Juan José Aranguren, se reunirán al mediodía con gobernadores patagónicos para analizar el incremento tarifario.

En declaraciones al diario santacruceño Tiempo Sur, indicó que los trabajadores se retirarán el miércoles de los pozos y de todos los puestos clave, por lo que las empresas deberán aplicar un plan de contingencia y, por seguridad, detener las plantas.

«Igual, si hace falta, nos vamos a colgar de las válvulas», detalló Solorza al ratificar que la intención de la protesta es interrumpir totalmente el ingreso de gas desde Tierra del Fuego al continente.

En Tierra del Fuego se producen unos 22 millones de metros cúbicos por día de gas natural, lo que equivale aproximadamente al 20 por ciento de lo producido en el país y de lo cual el 85 por ciento es inyectado al continente.

Solorza dijo que en la huelga también se denunciará «los problemas estructurales» que tiene Tierra del Fuego donde hay familias que siguen consumiendo la garrafa social dado que «Camuzzi no invirtió en infraestructura».

«Habría que quitarle la concesión por incumplimiento de las inversiones. Todas las obras en la provincia fueron realizadas por los municipios y el Gobierno nacional, aproximadamente 500 millones de dólares. Camuzzi no puso un peso y ahora le aumentaron las tarifas alegremente», cuestionó.

Los trabajadores interrumpirán las operaciones del gasoducto que se extiende a lo largo de 6.100 kilómetros entre Tierra del Fuego y Buenos Aires, a cargo de la empresa Transportadora de Gas del Sur (TGS), la mayor transportista de gas de América Latina.

La Federación Argentina del Petróleo, Gas y Biocombustibles había anunciado el 17 de mayo la medida decidida para el 1 de junio, por la que los trabajadores cortarán el gas proveniente de Tierra del Fuego en rechazo a la suba de tarifas.

El sistema de transporte que administra la firma TGS conecta las cuencas de gas Neuquina, San Jorge y Austral, al sur y oeste del país, con el Gran Buenos Aires, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los principales puntos de consumo del sur argentino.

Los 9.133 kilómetros de extensión de los gasoductos hacen de TGS la mayor transportista de gas de América Latina, con el trasporte en la Argentina del 62 por ciento del gas consumido por la población.