El ex ministro de la Corte Suprema de la Nación Raúl Zaffaroni fue suspendido para actuar como abogado por haber ejercido la profesión en contra de lo dispuesto por la ley que rige la actividad de los letrados.

La sanción, por el plazo de 90 días, la aplicó el Tribunal de Disciplina del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal (CPACF).

La Sala III del tribunal consideró que Zaffaroni violó el artículo 3 de la ley 23.187 cuando ante el Jurado de Enjuiciamiento de la Nación defendió al juez Axel López en la causa por supuesto “mal desempeño de sus funciones”.

El inciso 9 de esa norma prohíbe que, hasta dos años después de abandonar el cargo, quienes fueron jueces ejerzan como abogados en el ámbito donde actuaron como magistrados.

El abogado Omar Yasin, promotor de la denuncia que culminó con la sanción, recordó que Zaffaroni defendió a López en febrero de 2015, poco más de un mes después de presentar su renuncia ante la Corte.

El denunciante expuso que Zaffaroni habría vuelto a incurrir en conductas prohibidas cuando, recientemente, asesoró a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner antes de que fuera procesada por el juez federal Claudio Bonadio, en el sumario penal conocido como “dólar futuro”.

Por otra parte, la defensa de Raúl Zaffaroni calificó como «una venganza política de la más baja estofa» a la suspensión de la matrícula por 90 días que la sala III del Tribunal de Disciplina del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal le impuso al ex juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

La restricción para ejercer por dos años la profesión que establece el artículo 3 inciso 9 de la ley 23.187 «alude expresamente al ejercicio de la profesión ante el tribunal del que formaste parte», en este caso, la Corte Suprema, explicó el abogado Beinusz Szmukler, quien defendió a Zaffaroni ante el Tribunal de Disciplina del Colegio de Abogados.

Zaffaroni fue sancionado por defender en 2015 al juez de ejecución penal Axel López en el juri de enjuiciamiento que lo absolvió de la acusación de “mal desempeño de sus funciones” por dejar en libertad a un violador que después intentó abusar de una joven y la mató.

«Está claro que la restricción de dos años impide a Zaffaroni ejercer la profesión de abogado sólo ante la Corte pero no ante un juri de enjuiciamiento y hacer otra interpretación pretendidamente amplia, como lo hicieron los integrantes del Tribunal de Disciplina, es una barbaridad porque las prohibiciones tienen que ser expresas», sostuvo Szmukler.

El letrado impugnó la argumentación del Tribunal de Disciplina en el sentido de que, «como la Corte está por encima de todo, Zaffaroni no puede actuar ante ningún tribunal ni en un juri de enjuiciamiento, que además no forma parte del Poder Judicial».

En su áspera crítica de la resolución de la sala III del Tribunal de Disciplina el abogado de la defensa dijo además que «ellos sostienen que el juri de enjuiciamiento forma parte del Poder Judicial y quieren transformar en jueces a quienes lo integran, cuando en realidad lo forman legisladores, abogados y jueces».

El letrado recordó además que «el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal le rehabilitó la matrícula (a Zaffaroni después de renunciar a la Corte) para que pudiera ejercer, pero según su Tribunal de Disciplina no puede ejercer ante ningún tribunal. Entonces, ¿para qué le rehabilitó el Colegio la matrícula?»

«Yo diría que los tres firmantes (de la suspensión de la matrícula de Zaffaroni) deberían pasar nuevo examen de derecho», fustigó.

Szmukler contó finalmente que estaban considerando si apelaban la suspensión dispuesta por el Tribunal de Disciplina, «después de una primera reacción de indignación en la que Zaffaroni pensó en no apelar», una decisión para la que tiene un plazo de 10 días.