A una semana de la desaparición del avión con tres tripulantes que partió del de San Fernando rumbo a Formosa, el titular de la Administración Nacional de Aviación Civil (Anac), Juan Pedro Irigoin, admitió hoy que la búsqueda «es difícil» en medio de condiciones meteorológicas adversas.

No obstante, el administrador aseguró que «el despliegue es total», en cuanto a medios destinados a la tarea, mientras deslizó que «la principal hipótesis» es que la nave sufrió un accidente, aunque aseguró que no es la única.

«Desde que se activó el programa hasta hoy el despliegue fue total. Fue un trabajo muy profesional por gente muy capacitada. Se usaron todos los medios tecnológicos, apoyados por toda la fuerza de seguridad y aviación civil», expresó el funcionario en declaraciones a Radio la Red.

Por el momento no hay rastros del avión Mitsubishi biturbo con matrícula LV MCV que partió el lunes por la tarde del Aeropuerto de San Fernando con rumbo al de Las Lomitas.

A bordo de la nave se encontraban los pilotos Matías Ronzano y Facundo Vega, ambos oriundos de la ciudad bonaerense de Lincoln, y el único pasajero a bordo, Matías Aristi, hijo del dueño de la compañía agropecuaria Aibal S.A.

«La búsqueda es muy difícil. La verdad es que la alternativa más difícil para encontrarlo es el agua. Los aviones tienen una baliza para estos casos, que se activa y uno recibe señales para poder identificar dónde se ubica exactamente. Cuando caen en tierra es un elemento muy importante de hallazgo, pero cuando está sumergido en el agua, no podemos recibir esa señal», explicó Irigoin.

El funcionario sostuvo que «la hipótesis del accidente» es la principal que investiga el organismo, aunque admitió la existencia de otras en la que podría intervenir la Justicia.

El Centro Coordinador de Búsqueda comandado por Anac continuaba coordinando las actividades de rastrillaje por aire, agua y tierra.

Bajo condiciones meteorológicas adversas, con lluvias, nubes a baja altura y fuertes ráfagas de viento en diversos sectores, lo que hace imposible utilizar todos los medios aéreos disponibles, se dispuso por cuestiones de seguridad rastrillar la zona cercana a San Fernando con aeronaves oficiales que puedan volar bajo esas condiciones.

En tanto se dispuso las aeronaves civiles en el rastrillaje de la ruta declarada por el piloto en el plan de vuelo (San Fernando, Buenos Aires – Las Lomitas, Formosa), en un anocho de 20 millas (32 kilómetros), indicó en un comunicado la Anac.

Se señaló que las tareas se cumplen en tierra con patrullas de reconocimiento de Gendarmería Nacional y Prefectura Naval Argentina.

En tanto, por agua los rastrillajes están a cargo de Prefectura Naval Argentina con embarcaciones de distintas zonas, y la armada uruguaya colabora al cumplir la misma tarea en las costas de país vecino.