A cuatro años de la explosión del edificio de la calle Salta 2141 de Rosario, que dejó 22 muertos y más de 60 heridos, la semana próxima llegarán a esta ciudad expertos cordobeses para realizar un nuevo peritaje como parte de la causa que aún no tiene fecha para ser elevada a juicio oral y público y en la que hay once imputados y ningún detenido, informó hoy la fiscalía a cargo de la investigación.

«Pedimos introducir como prueba otro peritaje más transparente y la semana próxima llegarán a Rosario un equipo de expertos de la ciudad de Córdoba para realizarlo», reveló Graciela Arguelles, una de las fiscales de la causa por la explosión de la calle Salta, ocurrido el 6 de agosto de 2013.

En declaraciones a LT3-Rosario, la funcionaria judicial explicó que luego de que finalice el peritaje, «que aún no tiene tiempo estimado, recién la causa pasará a sorteo de fecha para el inicio del juicio oral y público». Además, calificó como «superlativa» a la pericia que realizarán especialistas de Córdoba, e indicó que las partes querellantes ya aprobaron la medida.

«Es prematuro estimar una fecha sobre el inicio del juicio porque recién la semana próxima llegarán a Rosario los peritos que aceptaron intervenir», remarcó Arguelles.

La primera pericia se realizó en Mar del Plata y sus resultados fueron entregados cinco meses después de la tragedia.

Allí, se constató que en caso «de haberse seguido los procedimientos legales y cumplido con las normas de seguridad el siniestro no se habría producido».

La causa, caratulada «estrago doloso agravado», tiene 31 cuerpos y en ella están imputados once personas que llegarán al juicio oral en libertad.

Entre los acusados se encuentran gasistas, funcionarios de la empresa Litoral Gas y los propietarios de la inmobiliaria que administraba el edificio siniestrado.

En tanto, por medio de las redes sociales, los familiares de las víctimas convocaron a concentrarse el domingo próximo en la vereda de la calle Salta 2141 a las 9.15 para reiterar el reclamo de «verdad y justicia» al cumplirse cuatro años de la explosión que derrumbó dos torres de 10 pisos cada una.

Además, los bomberos voluntarios de la zona harán sonar sus sirenas a la hora en que se produjo la explosión.