Varios navíos intervinieron en la noche del miércoles para rescatar a un bote a la deriva ante las costas de Libia atestado de inmigrantes, que informaron de la desaparición de al menos 15 personas, entre ellas un niño de 3 años.

La embarcación salió de las costas libias hacia el mediodía, aprovechando un momento de calma del mar, pero rápidamente las condiciones climatológicas empeoraron, explicó el fotógrafo Aris Messinis, embarcado en el Astral, un barco de la ONG española Proactiva Open Arms.

El bote fue detectado por un dron de reconocimiento de otra organización no gubernamental, la maltesa Moas, pero sus ocupantes no pudieron ser auxiliados hasta varias horas más tarde, en plena noche, porque se hallaba aún en aguas libias, donde esas ONGs no tienen derecho a penetrar.

Ante la urgencia del momento «hemos dicho a los guardacostas libios que íbamos a entrar en las aguas libias y finalmente aceptaron», explicó Aris Messinis. Los esfuerzos de los socorristas, en plena noche, consiguieron salvar a 113 personas, de las cuales 89 hombres, 11 mujeres, 11 adolescentes y dos niños.

Según Moas esos supervivientes aseguraron que al partir eran 130 personas a bordo. Una mujer nigeriana estaba en estado de conmoción tras perder a su hijo de 3 años y un adolescente explicó que perdió a cinco de sus acompañantes.