En el curso de una entrevista que dio al programa Newmakers, de la cadena informativa de TV C-Span, el gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, dijo que su gobierno va a dejar de pagar alrededor de 800 millones de dólares, de los 2 mil millones que se vencen el 1º de julio. «Hasta hoy la respuesta es no», le dijo a los entrevistadores. «No creo que vayamos a poder salir con una idea para conseguir ese dinero».

El 2 de mayo, el Gobierno de la isla cayó en incumplimiento de 370 millones de dólares, de los 422 que debía pagar en ese momento, según lo explicó el gobernador. «Lo mismo va a pasar el 1º de julio. Simplemente no tenemos el dinero», setenció García Padilla.

El incumplimiento será en el pago a los bonos preferenciales de Obligación General, cuyo pago está garantizado constitucionalmente.

El pasado 9 de mayo, el secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Jack Lew, viajó a San Juan, Puerto Rico, supuestamente para mostrar que el gobierno de Obama «continúa comprometido con la Mancomunidad para superar su crisis fiscal», una afirmación sin sentido que expresa que no tiene pensado hacer nada.

Mientras tanto, los fondos buitre siguen con sus exigencias. En marzo del 2014, muchos de estos fondos compraron 3.500 millones de dólares en bonos de la deuda de la isla, a 40% de su valor, y ahora intentan demandar a Puerto Rico para que les pague los bonos al 100%.

Quien lidera a estos depredadores es Aurelius Capital Management, que también está involucrado en el ataque contra Argentina, Brasil y muchos otros países. El presidente ejecutivo de Aurelius, Mark Brodsky, quien trabajaba para Elliot Associates, del buitre mayor Paul Singer, le dijo al The Wall Street Journal, a modo de queja, que «teniendo la oportunidad de emular» al ex presidente de Argentina, Néstor Kirchner, y a su sucesora, Cristina Fernández de Kirchner, o por otro lado al actual presidente argentino neoliberal Mauricio Macri, «el gobernador de Puerto Rico escogió a los primeros».