Pequeños productores hortícolas protagonizaron esta mañana un «verdurazo» en el porteño barrio de Constitución al regalar una tonelada y media de hortalizas en la esquina de Brasil y Hornos, como protesta ante la falta de rentabilidad en el sector.

Fueron entregados al público, que se agolpó en la esquina, unos 15 mil kilos de verduras y distintas clases de hortalizas: acelga, lechuga, cebollas de verdeo, entre otras.

Los productores sorprendieron con la medida a la gente que pasaba por el lugar y que enseguida buscó conseguir los productos hortícolas.

Los protagonistas del reclamo dijeron pertenecer a un grupo de agricultores enrolados en la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT).

Este tipo de protesta ya se había realizado en septiembre pasado, cuando se repartieron verduras en Plaza de Mayo y del mismo modo los consumidores se acercaron con changuitos para recibir las bolsas preparadas con 6 kilos de verduras cada una.

Los agricultores plantean cambios en el actual modelo de comercialización y solicitan restricciones a las cadenas de intermediarios, así como también una legislación que ponga más baratos los costos de alquiler y se impulse la compra de tierras para los quinteros.

Con la consigna «verdura para el pueblo, ante un modelo de hambre y ajuste», algunos de los 8 mil productores agrupados en la Confederación de Trabajadores en la Economía Popular (CTEP) se bajaron de tres camiones frente a la terminal de trenes de la Línea Roca y distribuyeron gratuitamente su producción.

«Fue la continuidad del verdurazo en Plaza de Mayo», sostuvo  Rafael Kkejzer, miembro del movimiento popular La Dignidad quien señaló que «al cajón de 30 kilos de tomate, los trituradores lo pagan 40 pesos, pero en las verdulerías, el kilo vale 25 pesos».

Expresó que «los que se perjudican son las dos puntas de la cadena: el productor y el comprador. Ganan los intermediarios especuladores».

El dirigente precisó que además buscan que «el gobierno cumpla con lo que prometió» y de este modo ponga en marcha «mercados populares y el desarrollo de cooperativas para que puedan comercializar en un mercado central».

«Sabemos que éste es un Gobierno restaurador y conservador queno va a plantear cambios, pero las expectativas de que esto cambie

siempre van a ser buenas en la medida que luchemos», dijo Klejzer al referirse al modo de comercialización.

Dijo que se organizaron distinto que en el verdurazo de Plaza de Mayo: «esta vez decidimos dar una bolsa con morrones, tomates comunes, tomates cherry, apio, lechuga y acelga».