La jueza de Instrucción Alejandra Rodenas, procesó hoy a dos hombres por abuso sexual en perjuicio de una nena de 4 años y un nene de 12, hijos de su pareja. Los hechos se habrían producido cuando los menores quedaban al cuidado de los hombres, mientras su madre, que tiene problemas de adicciones al alcohol y otras sustancias, salía a trabajar.
Dos hermanos, un nene de doce años y una nena de cuatro, fueron abusados sexualmente por la pareja de su madre y su nieto, portador de sida. La madre, que en 2014 padecía serios problemas de adicción, los dejaba en diferentes lugares cuando salía a trabajar y, aquella semana, había decidido dejarlos en la casa de su pareja.
Fue el tío de los niños el primero en dar cuenta de lo ocurrido, cuando, al visitarlos, encontró a su sobrina acostada en la cama y con signos de haber sido abusada, con el dueño de la casa acostado a su lado, simulando estar dormido. El nieto se encontraba en la cocina y cuando vio que se llevaban a la niña le reprochó que la madre la había dejado a su cuidado. Luego de vestir y llevarse su sobrina, ésta relató lo ocurrido, manifestando dolores en su cuerpo.
Enseguida fue llevada a un médico que al revisarla constató que había signos de abuso, por lo que les recomendó que hicieran otros exámenes y radicaran la denuncia en la comisaría.
La jueza Rodenas consideró que los hechos quedaron suficientemente acreditados por los testimonios de los familiares que estuvieron desde un primer momento con la niña, las declaraciones de las víctimas en Cámara Gesell y por los informes de médicos y peritos forenses, razón por la que procesó a los dos hombres por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por encontrarse a cargo de la guarda de la menor.
