La Justicia de Entre Ríos investiga la denuncia por el intento de abuso sexual a una chica de 15 años durante una fiesta de cumpleaños en una casa quinta de Paraná en el que estaría implicados al menos cuatro jóvenes.

Según la denuncia, los abusos se habrían perpetrado en una quinta situada en la zona de la Toma Vieja. En tanto, al lugar fueron invitadas varias adolescentes de 15 años, con la idea de que en medio de un abundante consumo de alcohol mantuvieron encuentros sexuales con los jóvenes en distintas partes del predio, aunque esa premisa sólo la habrían conocido los varones.

La denuncia fue realizada por una de las menores, quien señaló que sufrió intentos de violación por parte de cuatro jóvenes en una corta fracción de pocos minutos, hasta que pudo escapar del lugar.

Según reveló la prensa local, los acusados son hijos de empresarios y profesionales de Paraná. La mayoría estudian en la universidad en la capital entrerriana o en Santa Fe. Mientras que otros están ligados al fútbol o el rugby. De hecho, el dueño de la quinta es el publicista Ignacio Ramos Marrau, dueño de dos emisoras y su hijo es uno de los cuatro imputados.

Además, según detalló el diario Análisis Digital, los otros tres involucrados son un estudiante de abogacía y ex jugador de las inferiores de Belgrano de Paraná, un ex jugador de la reserva de Patronato -quien era el cumpleañero- y el hijo de un conocido empresario con tres negocios de ropa femenina en la peatonal de Paraná que habría intentado violar a la menor en la pileta de la casa.

La adolescente logró salir por sus propios medios de la fiesta cerca de la medianoche. Llegó como pudo al domicilio de una amiga con la que había asistido al cumpleaños, con algunas heridas y hematomas, tanto en la zona vaginal, como en la espalda, rodillas y en los brazos.

«Vamos a investigar hasta las últimas consecuencias qué fue lo que pasó aquí y cuáles son las implicancias», dijo el procurador general, Jorge Amílcar García. «Si ocurren estos delitos y son de gravedad, se interviene, con las posibles consecuencias penales ya conocidas», agregó.

Uno de los familiares de la joven se presentó para denunciar el hecho ante la fiscal de la Unidad de Violencia de Género María Fernanda Ruffati, quien ordenó allanar el predio.